El senador José María Carambia (Por Santa Cruz) presentó un proyecto estratégico que podría marcar -según indicó- un punto de inflexión en la industria petrolera convencional de Santa Cruz. La iniciativa busca fomentar inversiones que permitan modernizar la infraestructura, potenciar la producción y generar empleo de calidad, dinamizando así la economía local y regional.
Según se argumentó, el proyecto de ley busca reactivar la industria petrolera, “en decadencia en Santa Cruz y Chubut” tras la salida de YPF. La iniciativa, denominada “Fomento a las Inversiones de Petróleo y Gas Convencional“, propone incentivos para atraer nuevas inversiones privadas y garantizar la continuidad de la actividad en la región.
Ante el riesgo de miles de despidos y el impacto económico que la retirada de YPF podría generar, el proyecto busca recuperar la producción y proteger los puestos de trabajo, ofreciendo beneficios fiscales y reduciendo las barreras de entrada para nuevas operadoras.
Carambia destacó que la ley es una oportunidad única para “evitar el colapso del sector petrolero en ambas provincias y generar un nuevo ciclo de desarrollo energético”. De aprobarse, indicó que este marco normativo podría convertirse en un pilar fundamental para el futuro económico de la Patagonia.
El proyecto establece un marco de incentivos fiscales y regulatorios para atraer inversiones privadas en la exploración y explotación de petróleo y gas convencional, con el objetivo de reactivar la producción, preservar los puestos de trabajo y garantizar la continuidad de la actividad hidrocarburífera en la región.
Detalles
Entre las medidas más destacadas se encuentran la reducción del 30% en el IVA, el impuesto a las Ganancias y las cargas patronales, así como la exención de retenciones a la exportación durante los primeros 10 años, con un aumento gradual hasta un máximo del 5% en el futuro. Además, se contempla la exención de aranceles de importación para maquinarias e insumos clave en el proceso de extracción.
Carambia destacó que se da frente a la crisis que atraviesa la industria petrolera convencional, especialmente en provincias como Santa Cruz, Chubut, Neuquén, Mendoza, Río Negro y Tierra del Fuego. “Este proyecto no sólo busca frenar la desinversión que afecta a miles de familias, sino también crear nuevas oportunidades de desarrollo en las regiones que históricamente han sido el motor energético de nuestro país”, afirmó.
La ley apunta a revertir el impacto negativo generado por el retiro de YPF de los yacimientos convencionales, que ha provocado la pérdida de más de 2.800 puestos de trabajo directos e indirectos en Santa Cruz, además de un descenso significativo en la recaudación fiscal y el deterioro de las economías regionales. La iniciativa también contempla el impulso de técnicas de recuperación secundaria y terciaria para revitalizar los yacimientos maduros, prolongando su vida útil y maximizando su rentabilidad.