El cambio climático puede palparse y comprobarse con gran preocupación en España. Desde que hay mediciones científicas confiables, vive su cuarto peor registro de sequías en todo el país y sus reservas de agua están experimentando una merma muy preocupante.
El sol de este verano ha sido demoledor, con temperaturas que superaron los 40 y hasta los 45 grados Celsius en muchos lugares durante varios días seguidos. Cada ola de calor se prolonga más días en comparación con años anteriores, disminuye el caudal de los ríos, arroyos y lagunas y pone en peligro la vida humana.
El cuarto año más seco y el verano con más altas temperaturas
En 1961, durante la dictadura de Francisco Franco, hubo una sequía notable que hizo que su gobierno reaccionara. Creó de manera artificial algunas lagunas y reservorios de agua. Sumado a los ríos y arroyos que surcan el mayoritariamente paisaje escarpado, España pasó a ser el país con más pantanos de la Unión Europea y el quinto del mundo.
Pero en estos últimos años, contempla como sus embalses se vacían, lo que provoca que queden al descubierto estructuras que llaman el interés de los turistas y de la ciencia.
Esto es lo que ocurrió con el embalse de Valdecañas en el río Tajo. Lleno de agua, se "devoró" el dolmen de Guadalperal, conocido como el "Stonehenge español", en referencia a ese enigmático monumento de piedras circulares, en Gran Bretaña, que data de entre finales del V y el III milenio a.C.
Por culpa de la sequía prolongada de este verano, ha vuelto a ser contemplado en todo su esplendor desde que fue ocultado por las aguas en 1963. El agua se ha corrido y ya no lo cubre.
El mayor parque natural de España, seco
Pero si en el caso del Guadalperal, una cosa cambio por otra - con un aparente beneficio para el turismo - hay una zona que se perjudica y hace sufrir a toda España.
Se trata del parque de "Doñana", un espacio natural que abarca Huelva, Sevilla y Cádiz en Andalucía. Por su gran extensión es el hogar de numerosas especies de aves acuáticas, que suelen alcanzar cada año los 200.000 individuos.
Sin embargo, este año la sequía y el calor lo golpearon con fuerza.
El CSIC (Consejo Superior de Investigaciones Científicas) publicó un mensaje por Twitter: "la sequía y la sobreexplotación de los acuíferos secan la última laguna permanente de #Doñana. Es la tercera vez que Santa Olalla, la laguna permanente más grande de Doñana, se seca desde que se tienen registros".
España tiene gran parte de su economía, fuera del turismo (15% del PBI) dependiente de la producción agro ganadera. El gran problema es que mientras aumentan las hectáreas de regadíos, merma año tras año la cantidad de reservas de agua disponible.
Un otoño complejo
Las predicciones son las que traen la preocupación por los efectos ya palpables del cambio climático. El verano es seco en España, pero en otoño e invierno no solo llueve, también nieva en gran parte del país. Ahora se escuchan voces de alarma, las previsiones meteorológicas hablan de una temporada de seca que se continuará aún con el final del verano. Así, se espera que durante el otoño falten lluvias, precisamente donde hay más sequía y que en la mayor parte del territorio las temperaturas estén por encima de la media entre 0,5 y 1 grado.
Para peor, según el Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico, al menos tres cuartas partes del país están en riesgo de desertificación.