La Sala 7 del Tribunal de Juicio condenó a Marcos Andrés Contreras, Fredy Rearte Sansón y Viviana Simona Arias por el delito de tenencia de estupefacientes con fines de comercialización y a Manuel Rolando Rearte por tenencia de estupefacientes con fines de comercialización y tenencia de arma de fuego de uso civil.
El fiscal Penal de la Unidad Fiscal contra la Narcocriminalidad (UFINAR), Santiago López Soto, representó al Ministerio Público Fiscal durante el juicio en el que Manuel Rolando Rearte fue sentenciado a cuatro años y ocho meses de prisión; Viviana Simona Arias a tres años y dos meses por ser partícipe necesaria del delito; a Fredy Rearte Sansón cuatro años y dos meses como autor del delito de tenencia de estupefacientes con fines de comercialización y a Marcos Andrés Contreras, a dos años y ocho meses, por ser partícipe secundario.
Fredy Rearte, Manuel Rearte y Viviana Arias y fueron declarados reincidentes, por primera, segunda y tercera vez, respectivamente.
La causa
La UFINAR inició una investigación en noviembre de 2021 a raíz de una denuncia anónima que señalaba que un hombre vendía sustancias prohibidas en un domicilio del macrocentro salteño.
Personal de la UFINAR y de la Policía de la Provincia identificaron la vivienda en 12 de Octubre y Pasaje Saravia, en donde funciona una verdulería, y al hombre, como Fredy Rearte Sansón; registrando en distintas oportunidades el intercambio de dinero por “paquetitos” con personas que llegaban hasta el lugar.
Entre las visitas al domicilio, los agentes observaron una camioneta Peugeot en la que se encontraban Manuel Rolando Rearte y Viviana Arias, padres de Rearte Sansón, ambos con antecedentes por infracción a la ley 23.737, y registraron el momento en que la mujer intercambiaba, desde su posición de acompañante del vehículo, dinero por paquetitos con cinco individuos. Similar situación se dio con el conductor.
A comienzos de diciembre, los investigadores toman conocimiento, a través de entrevistas con vecinos, de que el hombre y sus padres sospechaban de que estaban siendo investigados por lo que cerraron la verdulería y se trasladaron al barrio Tres Cerritos. Además, identifican a Manuel Contreras y otro hombre como “colaboradores” en la venta de estupefacientes.
Con la información recolectada se ubicó el nuevo domicilio, manteniendo la vigilancia en ambos lugares, al que luego se sumó el de los “colaboradores”. De la consulta con el sistema del Ministerio Público Fiscal se advirtió que este último ya había sido allanado por venta de estupefacientes y resultó detenida una mujer, madre de uno de los colaboradores.
A lo largo de diciembre, enero y febrero, los investigadores registraron el movimiento de la camioneta entre los tres domicilios, así como la llegada de numerosas personas que intercambiaban dinero por paquetitos. De la detención de los algunos de los “compradores”, se pudo establecer que se trataba de cannabis sativa y cocaína.
En base a los elementos obtenidos, el fiscal Gustavo Torres Rubelt solicitó al Juzgado de Garantías autorización para allanar los tres domicilios, medida que fue otorgada. Culminada la requisa, se realizó el pesaje de lo secuestrado, obteniendo más de 20 mil dosis de la sustancia amarillenta y más de 350 dosis para la vegetal. El Narcotest arrojó positivo para cocaína la primera y Cannabis para la segunda.