Boca sufrió una contundente derrota por 2-0 ante River en La Bombonera, en el duelo correspondiente a la séptima fecha de la Copa de la Liga. Sin embargo, no hay tiempo para lamentarse, ya que, ahora, el Xeneize deberá cambiar su enfoque y prepararse para la próxima semifinal de la Copa Libertadores contra Palmeiras.
Después del empate 0-0 en su partido local contra el equipo brasileño, dirigido por Jorge Almirón, Boca tuvo la difícil tarea de enfrentar a su eterno rival, River, en su propio estadio. A pesar de la derrota, tanto el equipo como los hinchas aseguraron que el resultado ante su clásico rival pasa a un segundo plano, ya que el objetivo principal del año es avanzar a la final de la Copa Libertadores.
Con este objetivo en mente, el Xeneize ya armó su plan para disputar la revancha. Boca viajará a Brasil dos días antes del crucial partido de la Copa. Después del entrenamiento en Ezeiza el martes, la delegación azul y oro partirá hacia San Pablo, donde comenzarán sus entrenamientos en el Predio de Corinthians a partir del miércoles.