La histórica conquista de la Copa América 2021, que cortó una racha de 28 años sin títulos para el seleccionado argentino y significó el primero de Lionel Messi tras cuatro fatídicas finales. Aquella definición con Brasil en el mítico estadio Maracaná de Río de Janeiro en medio de una fuerte ola de contagios y muertes por la pandemia, con la presencia de unos pocos privilegiados, marcó a toda una generación y Lionel Messi recordó la gesta en sus redes sociales.
“Dos años”, escribió la leyenda internacional en su cuenta oficial de Instagram junto a las imágenes que reflejaron los festejos de una hazaña histórica.
La 47ma. edición del torneo continental se iba a disputar en conjunto entre la Argentina y Colombia pero ambos países desistieron de la organización por el COVID-19 y la crisis social. Y Brasil se ofreció a ser el anfitrión. En ese contexto, Lionel Scaloni y su cuerpo técnico conformaron un plantel que ratificó el cambio generacional que había empezado desde el inicio de su ciclo en septiembre de 2018. El entrenador fue determinante en sus decisiones, por ejemplo, al darle la titularidad en el arco a Emiliano “Dibu” Martínez por sobre Franco Armani, quien por aquellos días estaba condicionado por una demorada alta epidemiológica.
El 13 de junio de 2021, en la previa del debut contra Chile, el capitán del seleccionado brindó una conferencia de prensa en la que expresó que la Copa América de Brasil era el “momento” para “dar el golpe” y desde su aporte fue decisivo: se transformó en el máximo goleador, asistidor y figura del certamen.
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El seleccionado se presentó en el torneo con un disputado empate (1-1) contra Chile en Río de Janeiro con un golazo de La Pulga de tiro libre. En el equipo titular estuvo el Dibu Martínez pese a que Armani ya estaba recuperado del coronavirus. El marplatense empezó a mostrar su potencial tras taparle un penal (cobrado a instancias del VAR) a Arturo Vidal que luego terminó en el gol de rebote de Eduardo Vargas.
La Scaloneta consiguió su primera victoria en el torneo en la segunda fecha contra Uruguay, que venía con descanso tras quedar libre en la primera jornada. El tanto del triunfo por la mínima fue convertido por Guido Rodríguez, quien se había metido en el equipo por una lesión de Leandro Paredes, luego de un buen centro de Messi, que empezaba con su racha de asistencias.
Para el tercer compromiso de la fase de grupos, Scaloni empezó con la rotación y le dio descanso, entre otros, a Rodrigo De Paul. Fue el primer partido desde el arranque para Alejandro “Papu” Gómez y Ángel Di María, quienes armaron la gran jugada del 1-0 definitivo que definió la clasificación a los cuartos de final.
La Albiceleste cerró la primera parte del certamen con una contundente goleada por 4-1 sobre el débil equipo boliviano con un conjunto completamente alternativo pero siempre con la presencia de Messi, autor de un doblete. Este cotejo quedó marcado por haber sido el último de Sergio “Kun” Agüero con el seleccionado argentino.
En el inicio de la fase eliminatoria, Argentina afrontó un duro cruce de cuartos de final contra la Ecuador de Gustavo Alfaro. El partido se abrió con el gol de Rodrigo De Paul luego de un pase del astro rosarino y se amplió con una nueva asistencia del 10 para Lautaro Martínez. El cierre estuvo a cargo del director de orquesta: falta sobre Di María y tiro libre perfecto del mejor del mundo al borde del área para el 3-0 definitivo.
Otra gran producción se dio contra Colombia. Con un gol del Toro, luego de otra asistencia de Messi la Albiceleste abrió el marcador, pero los cafeteros empataron a través de Luis Díaz. La definición por penales fue una historia aparte: el Dibu Martínez se hizo gigante con tres penales atajados. “Mirá que te como”, la desafiante frase del arquero a sus rivales, se transformó en meme. También se inmortalizó la imagen del “Bailá ahora” de Messi dedicado a Yerry Mina.
Finalmente llegó el partido decisivo. La final contra el clásico rival en el mítico estadio de Río de Janeiro. Y Argentina pegó gracias a un gran pase largo de De Paul para que Di María quede inmortalizado con una definición precisa por arriba de Ederson. El desahogo llegó después del pitazo final: Messi se tiró al piso con las manos en la cara y no pudo salir de la montaña humana hasta que llegó el último compañero a abrazarlo.
El festejo dejó imágenes imborrables, como el abrazo de Messi con Scaloni, el agradecimiento hacia el capitán que fue llevado en andas por sus compañeros, el saludo con Neymar y la emocionante charla de Di María con su familia por videollamada: “Algún día se iba a romper la pared y se rompió”. Y Leo revivió aquel glorioso episodio en sus redes sociales.
