Un fallo de la Cámara de Apelaciones en lo penal de San Isidro puso puntos suspensivos a la realización del juicio por la muerte de Diego Armando Maradona, que iba a comenzar el próximo 4 de junio ante el Tribunal Oral en lo Criminal N°3 de ese distrito, con los ocho acusados por homicidio con dolo eventual, que prevé penas de entre 8 y 25 años de prisión. Fue luego de que los magistrados de la Sala II aceptaran el planteo de la defensa de una de las acusadas, que pidió ser juzgada por un jurado popular.
En la resolución por mayoría de la Cámara de 17 páginas a la que accedió Infobae, los jueces Ernesto García Maañón, Gustavo Herbel y Carlos Blanco, no sólo avalaron el pedido de Gisela Madrid, una de las ocho imputadas por la muerte de Maradona, sino que indicaron que hay otros acusados que pueden seguir el mismo camino del juicio por jurados.
“No surge de las constancias digitales, correspondientes a los autos principales, que los restantes coimputados Luciano Leopoldo Luque, Ricardo Omar Almirón, Pedro Pablo Di Spagna y Mariano Ariel Perroni hayan expresamente renunciado a la garantía constitucionalmente protegida a ser juzgados por un tribunal de jurados; siendo así que su situación procesal -en principio- se encontraría abarcada por las mismas previsiones normativas que las anteriormente analizadas; correspondiendo, salvo renuncias expresas, tramitar su proceso ante jurados”, reza el fallo.
Fuentes vinculadas al expediente que instruyeron los fiscales Cosme Iribarren, Patricio Ferrari y Laura Capra explicaron a este medio que hay tres de los acusados habilitados para ir a juicio por jurados que “dijeron que no querían acceder a esa modalidad”. Más allá de eso, destacaron que el fallo de la Cámara “genera un limbo que nadie sabe bien cómo se va a resolver”.