Este domingo Argentina y Francia definirán al campeón del Mundial de Qatar y el árbitro será el polaco Szymon Marciniak, quien estará acompañado por Pawel Sokolnicki y Tomasz Listkiewicz, como asistentes, y Tomasz Kwiatkowski en el VAR.
El europeo será el primer juez de su país en ser principal en una final del máximo torneo FIFA y en el actual campeonato ha dirigido dos partidos: Francia 2-1 Dinamarca y Argentina 2-1 Australia. Además, el estadounidense Ismail Elfath será el cuarto árbitro.
En sus dos presentaciones, mostró cinco tarjetas amarillas (ninguna contra futbolistas albicelestes), cobró 18 faltas y no expulsó a ningún jugador. Además, no ha estado envuelto en grandes polémicas, motivo por el cual ha sido el seleccionado por el ente que regula el fútbol mundial. Mientras que en Rusia 2018 también dirigió a la Selección, nada menos que en el debut ante Islandia en el 1 a 1 en el que Lionel Messi falló un penal.
Marciniak, de 41 años, es considerado como el mejor referee de la historia de su país y en los últimos años su carrera ha ido en ascenso. Su debut como profesional fue en 2009, pero desde 2015 que es internacional y tres años más tarde pitó en la final de la Supercopa de Europa entre Real Madrid y Atlético. En abril, por ejemplo, se convirtió en el primer polaco en estar al frente de una semifinal de la Champions League.
Se lo recuerda en España por dos de las derrotas más duras del Barcelona en la historia reciente de la Liga de Campeones. Estuvo en la caída de los culés en París por 4-0 ante PSG en 2017, la misma que obligó a la épica remontada de 6-1 en el Camp Nou, y también arbitró el triunfo de la Juventus 3-0 sobre el Barça por los cuartos de final de esa misma edición.
En cuanto a sus características de arbitraje, es pragmático para lo técnico y disciplinario, en encuentros donde las características es el juego franco, goza de una gran preparación, el problema se le dificulta si el planteo de la final pasa por una planificación de los equipos de una marcación de “Pressing constante” porque no está acostumbrado a ese tipo de juego. A su vez, el VAR será su compatriota, que por sus característica y respeto sobre Szymon, seguramente no se atreverá a invitarlo a chequear ninguna jugada en las áreas si su posicionamiento es el ideal.
El último antecedente de un polaco en una final del Mundial fue en 1990, cuando la Argentina fue derrotada por Alemania. En aquella oportunidad, Michał Listkiewicz se desempeñó como asistente en el compromiso que se definió por un penal en favor de los europeos sobre el cierre del duelo.
Argentina y Francia, que han eliminado en semifinales a Croacia (3-0) y Marruecos (2-0), respectivamente, disputarán una final inédita en la historia de la Copa del Mundo de fútbol. Será la sexta final para el combinado sudamericano, que se proclamó campeón en 1978 y en 1986 y la cuarta para el cuadro galo, ganador también como local en 1998 y en la pasada edición de Rusia 2018.
Ambas selecciones están empatadas con Uruguay con dos títulos, a dos de Alemania y de Italia, y a tres de la pentacampeona Brasil. Inglaterra y España, con uno, completan el palmarés del Mundial. Argentina ha tenido como rivales en sus finales a Uruguay, Países Bajos y Alemania (dos bajo la denominación de Alemania Federal); y Francia se ha medido por el título a Brasil, Italia y Croacia. La final se jugará este domingo, desde las 12 (hora argentina) en el estadio Lusail, el mismo en el que se disputó el partido inaugural entre Qatar y Ecuador.