Ángel Di María, conocido como “el héroe de las mil finales”, ha dejado una marca indeleble en la historia del fútbol argentino y mundial. Su carrera, llena de altibajos, ha sido un ejemplo de perseverancia, talento y capacidad para resurgir en los momentos más críticos. Di María, nacido en Rosario, Santa Fe, ha sido un pilar fundamental para la Selección Argentina, especialmente en las finales, donde su habilidad para definir partidos ha sido crucial.
Desde sus inicios en el club de barrio El Torito, Di María mostró un talento innato para el fútbol. Su habilidad con el balón llamó la atención de los ojeadores de Rosario Central, donde comenzó su carrera profesional. Su desempeño en el club rosarino le valió un lugar en la selección sub-20 de Argentina, con la que ganó el Mundial Sub-20 en 2007. Este fue solo el comienzo de una carrera llena de éxitos y desafíos.
Uno de los momentos más destacados de su carrera fue en los Juegos Olímpicos de Beijing 2008. Di María fue convocado por el entrenador Sergio Batista, a pesar de no tener mucha continuidad en su club, el Benfica. En la final contra Nigeria, Di María anotó el gol decisivo que le dio a Argentina la medalla de oro. Este gol, una definición por encima del arquero, se convirtió en una de sus jugadas características y lo catapultó a la fama internacional.
A lo largo de su carrera, Di María ha jugado en algunos de los clubes más importantes del mundo, incluyendo el Real Madrid, el Manchester United y el Paris Saint-Germain. En cada uno de estos equipos, ha demostrado su capacidad para adaptarse y brillar en los momentos más importantes. Su paso por el Real Madrid fue especialmente exitoso, ganando la Liga de Campeones en 2014 y siendo nombrado el mejor jugador de la final.
Sin embargo, su relación con la Selección Argentina ha sido una montaña rusa de emociones. Di María ha sido criticado en numerosas ocasiones por su desempeño en partidos clave, pero también ha sido el héroe en muchas finales. En la Copa América 2021, Di María anotó el gol de la victoria contra Brasil en la final, dando a Argentina su primer título importante en 28 años. Este gol, nuevamente una definición por encima del arquero, consolidó su reputación como el “héroe de las mil finales”.
El camino de Di María en la selección ha sido comparado con el monomito del héroe, una estructura narrativa común en los relatos míticos, identificada por el historiador Joseph Campbell. Según esta teoría, el héroe pasa por una serie de etapas, incluyendo la llamada a la aventura, la superación de obstáculos y el regreso triunfal. Di María ha vivido cada una de estas etapas en su carrera, enfrentando críticas, lesiones y momentos de duda, pero siempre resurgiendo con fuerza en los momentos más importantes.
En su última aparición con la Selección Argentina, Di María volvió a demostrar su valía. En la final de la Copa América 2024, jugada en Miami, Fideo tomó el máximo protagonismo tras la lesión de Lionel Messi. El rosarino se despidió de la selección con todos los honores, siendo aclamado por sus compañeros y por los aficionados como uno de los grandes héroes del fútbol argentino.
La carrera de Di María es un testimonio de la importancia de la perseverancia y la capacidad para superar la adversidad. A lo largo de los años, ha demostrado una y otra vez que es capaz de resurgir en los momentos más difíciles y de brillar en las finales. Su legado en el fútbol argentino y mundial es innegable, y su nombre será recordado como el “héroe de las mil finales” por generaciones.
