En un marco de suma emoción y con el merecido homenaje, Leonardo Ponzio tuvo un recibimiento en su partido despedida que generó la ovación de 70 mil almas presentes en el Estadio Monumental.
El ex capitán millonario fue el último en ingresar al campo de juego luego de que lo hicieron sus invitados, grandes leyendas de la institución, que también tuvieron el cálido saludo de la gente. Entre los más aplaudidos estuvieron Enzo Francescoli, Ariel Ortega y Marcelo Gallardo.
Quienes acompañaron a Ponzio se sentaron en una pequeña tribuna. Una vez que todos se ubicaron, comenzó un juego de luces con los colores millonarios, blanco y rojo al costado del campo de juego. Detrás de los arcos aparecieron llamas artificiales y los papelitos. Los celulares del público también le dieron un color especial.
Luego de un minuto, Ponzio ingresó solo y se lo vio emocionado. Saludó a la gente y comenzó la ovación del público: “Vení, vení, cantá conmigo, que un amigo vas a encontrar, que de la mano de Leo Ponzio, todos la vuelta vamos a dar”.
“Gracias por venir a compartir esta noche conmigo. Gracias a todos los muchachos, ustedes saben que me pusieron en este lugar a mí. Me dieron el valor que una persona creo que lo mejor que le puede pasar, el valor humano. Gracias a mi familia, nunca soñé esto. Soy adoptado en esta casa. No sé qué decir, tengo muchas emociones. No tiene explicación esto. Lo superó todo. Muchas gracias en serio”, dijo Ponzio con la voz quebrada mientras de fondo se escuchó del público, “Ponzio es de River y de River no se va”.
Luego el actual presidente, Jorge Brito, y su antecesor, Rodolfo D’Onofrio, le entregaron una plaqueta, por su trayectoria y cantidad de partidos, en reconocimiento, el jugador que más títulos ganó con la camiseta del club.
Pero luego de los reconocimientos Leo quiso que el partido comience cuanto antes y disfrutar de la fiesta junto con sus amigos. El partido fue un túnel del tiempo en el que los hinchas pudieron volver a ver a viejas glorias en su cancha. Los enganches del Burrito Ortega, los toques mágicos del Príncipe Francescoli, la zurda intacta de Andrés D’Alessandro, los tacos de Fernando Cavenaghi o las ganas de un movedizo Hernán Díaz hicieron delirar al público.
El evento en el Monumental estuvo plagado de impactos emotivos estuvieron en cada momento y el resultado pasó a segundo plano. A cada pincelada de los cracks que acompañaron a Leo generaron innumerables aplausos.
En tanto que Ponzio se lo tomó enserio y a los dos minutos metió un tiro de emboquillada que Julio Chiarini llegó a desviar. Era un golazo para el León que se divirtió y todo el tiempo lució una sonrisa que fue imborrable en el marco de una noche inolvidable. Aunque un pico se vivió en el minuto 23 (número de Ponzio) en el que el santafesino fue otra vez ovacionado y la gente desde las tribunas mostró banderas y carteles.
Ponzio tuvo dos etapas en River Plate, la primera de 2006 a 2009 y la segunda de 2011 a 2021. Ganó 18 títulos y se convirtió en un emblema del club. Este miércoles recibió un merecido tributo en el Estadio Monumental.