El equipo de Rubén Forestello hizo de su casa su fortaleza. Con más actitud que juego pero el compromiso de sacar adelante el encuentro ante un duro rival como la “Crema”, logró un triunfo agónico que le permitió escalar al segundo lugar de la tabla.
Empezó mejor que la visita. De hecho, en la primera etapa contó con varias situaciones para abrir el marcador y con innumerables pelotas paradas a favor que no supo resolver.
En los primeros minutos, Rojas llegó al área rival y definió al cuerpo del arquero Marco Bergia. Gimnasia llegaba y complicaba al rival.
La más clara fue el zurdazo de Facundo Heredia que impactó en el travesaño. Le siguieron un cabezazo de Matías Birge y otra tijera del mediocampista que se fue apenas desviada.
Atlético mejoró su funcionamiento en el complemento y obligó a Gimnasia a retrasarse en su campo. Forestello apostó a los ingresos de Martín Esparza y Tomás Attis y al ingreso obligado de Raúl Chamorro por Juan Galetto, quien queria seguir jugando pero un corte sufrido en su cabeza y la tarjeta amarilla que lo condicionaba lo hicieron irse al banco.
En la Crema, Ezequiel Medrán mandó a la cancha a Bautista Tomatis y Lucas Albertengo. Emparejó el trámite del partido y cuando todo se encaminaba a un empate, Walter Busse recuperó una pelota en el mediocampo, asistió a Rojas y el “Pollo” hizo delirar al Gigante con un golazo de media distancia para que los tres puntos queden en Salta.
El próximo sábado a las 17, el Albo visitará a Deportivo Madryn, por la cuarta fecha de la Primera Nacional.
