La ATP decidió no sancionar al tenista alemán Alexander Zverev luego de llevar adelante una investigación a raíz de las acusaciones de violencia de género que hizo la expareja del jugador. El organismo concluyó que “no se hallaron pruebas suficientes” para corroborar la denuncia de la joven.
La ATP ordenó una investigación en octubre de 2021 luego de que la exnovia de Zverev, Olya Sharypova, acusara de abusos al subcampeón del Abierto de Estados Unidos 2020.
Según un comunicado que publicó el ente que rige el tenis masculino en las últimas horas, “a falta de testigos y pruebas fiables, además de los testimonios contradictorios de Sharypova, Zverev y otros entrevistados, la investigación no fue capaz de corroborar las acusaciones de abuso o si se infringieron las normas de la ATP en cuanto a infracciones in situ o infracciones graves de los jugadores”.
La ATP ordenó una investigación sin precedentes por el caso Zverev
Luego de la denuncia de Sharypova, la ATP le encargó a la agencia externa Lake Forest Group (LFG) una investigación que finalmente se prolongó por 15 meses. En ese lapso, quienes llevaron adelante el caso entrevistaron a más de 20 personas y examinaron mensajes de texto, archivos de audio y fotos proporcionados por Sharypova y Zverev.
Para llevar adelante su tarea, los investigadores contaron con “materiales tomados de manera voluntaria de los dispositivos electrónicos de Zverev”, los cuales fueron obtenidos a través de un experto externo.
El presidente de la ATP, Massimo Calvelli, dijo que apelar a investigadores especializados fue “algo nuevo” para el organismo. Y agregó: “Creemos que el exhaustivo proceso era necesario para llegar a un juicio fundado”.
El dirigente sostuvo que este caso “ha demostrado la necesidad de ser más receptivos en asuntos de protección”. “Es por eso por lo que hemos dado pasos en esta dirección y aún hay mucho trabajo por delante”, finalizó.
Los hechos denunciados
La expareja de Zverev lo denunció por distintos hechos de violencia de género. Algunos de ellos presuntamente ocurrieron en medio de la disputa de torneos de la ATP. El tenista siempre ha negado las acusaciones.
La investigación se centró principalmente en las acusaciones por presuntas situaciones de abuso durante el Masters 1000 de la ATP en Shangai en 2019, pero también en “la supuesta mala conducta en Mónaco, Nueva York o Ginebra, tal y como menciona la información pública”.
La ATP comunicó que los investigadores no pudieron encontrar pruebas suficientes “para confirmar las acusaciones de abuso” contra el tenista que tiene 25 años y que actualmente ocupa el puesto número 14 del ranking.
De todos modos, el organismo advirtió que reconsiderará la sentencia “si se dieran nuevas evidencias o si cualquier procedimiento legal revela la violación de las reglas de la ATP”.