El precio de la nafta podría convertirse en un importante aliado del presidente Javier Milei y el ministro de Economía, Luis Caputo, ya que existe la posibilidad de que baje a partir de mayo, si se mantiene o se profundiza el descenso de la cotización del petróleo en el mercado internacional.
Esa posibilidad ayudaría en el propósito de retomar una desaceleración de la inflación o, al menos, atenuar una suba del Índice de Precios al Consumidor para el mes que viene y fue planteada hoy por el presidente y CEO de YPF, Horacio Marín.
En declaraciones a radio Mitre, el titular de la petrolera de mayoría estatal explicó que “una vez por mes” se determina un nuevo precio de la nafta en base a cuatro variables: “el precio del crudo, el tipo de cambio, los impuestos y el precio de los biocombustibles”.
Sube el dólar, baja el Brent
En ese sentido, habrá que esperar hasta fines de abril para sopesar dos de los cuatro factores mencionados, ya que en lo que va del mes el tipo de cambio mayorista muestra un alza del 10,1%, en tanto el precio del barril Brent (referencia para el mercado local) tuvo un descenso del 14,1%.
Sin que hayan mediado modificaciones impositivas y con un aumento del 3,5% en el biodiésel y el bioetanol a principios de mes, resta conocer la evolución de las dos principales variables en la segunda mitad de abril, a fin de saber qué definición se tomará con los precios de la nafta y el gasoil.
“Si a fin de mes hay que bajar la nafta, se bajará”, sentenció Marín al respecto.
La incidencia de la nafta en la inflación
Si bien el precio de los combustibles líquidos no tiene una incidencia significativa en la ponderación del Índice de Precios al Consumidor -según la región, entre el 3,78% y el 5,12% del total- su impacto indirecto es importante en cuanto a su peso como insumo en el transporte en general y de mercaderías en particular, por lo que una eventual baja tendría impacto en la inflación.
A partir de las turbulencias cambiarias de las últimas semanas y mucho más con la adopción del nuevo régimen con la eliminación del cepo, diferentes economistas estiman que habrá una aceleración en la inflación por lo menos en abril y mayo, con índices que descuentan superarán al 3,7% de marzo, el más alto desde agosto del año pasado.
En ese marco, una baja en el precio de la nafta no permitiría por sí solo volver a los niveles inflacionarios previos a marzo, pero al menos evitar una suba pronunciada que lleve el IPC a niveles cercanos al 5%.