En un contexto de estabilidad cambiaria, el Banco Central de la República Argentina (BCRA) completó dos meses consecutivos acumulando reservas.
Este martes, adquirió USD 22 millones en el Mercado Único y Libre de Cambios (MULC), alcanzando reservas brutas internacionales de USD 30.927 millones tras un aumento diario de USD 49 millones.
La estrategia del BCRA: sostener las reservas
Las compras de divisas forman parte de una estrategia del BCRA para fortalecer sus reservas en medio de la calma en el mercado de cambios. Este fortalecimiento resulta clave para las negociaciones con el Fondo Monetario Internacional (FMI), que exige metas específicas de acumulación como parte de sus acuerdos.
El dólar oficial cerró en $977,30 para la compra y $1.037,68 para la venta. En el Banco Nación, los valores fueron ligeramente más bajos, situándose en $987,50 y $1.027,50 respectivamente.
Por su parte, el dólar mayorista, utilizado en transacciones comerciales e industriales, avanzó $1, alcanzando los $1.008.
Los paralelos y futuros del dólar
En el mercado informal, el dólar blue cerró a $1.135 para la venta, manteniendo la brecha con el oficial en niveles moderados.
En cuanto a los dólares financieros, el MEP cotizó a $1.077,83, con una brecha del 6,9% respecto al oficial. El Contado con Liquidación (CCL) se posicionó en $1.109,43, lo que representa un spread del 10,1%.
Por otro lado, el dólar ahorro o solidario, y el dólar tarjeta se ofrecieron a $1.644. Mientras tanto, el dólar cripto cerró en $1.113,76, alineado con el resto de los tipos de cambio alternativos.
En el mercado de futuros, los contratos hasta marzo del próximo año presentaron leves bajas. Las tasas nominales anualizadas (TNA) superan el 30% para los vencimientos de diciembre y enero. Estos caerán por debajo de ese nivel a partir de febrero.
¿Qué puede pasar con las reservas?
El aumento en las reservas del BCRA es una señal positiva en un contexto donde la estabilidad del tipo de cambio es crucial. Sin embargo, los desafíos persisten, especialmente ante las presiones inflacionarias y la necesidad de cumplir con los compromisos internacionales.
La acumulación de divisas también está ligada a la calma actual en los mercados paralelos, aunque cualquier cambio en las expectativas podría generar tensiones. El foco estará en las políticas cambiarias y monetarias que el Gobierno adopte para sostener este equilibrio en los próximos meses.