El blanqueo de capitales, cuya primera etapa cerró este jueves, superó todos los pronósticos y permitió que los depósitos en dólares alcanzaran un nuevo récord, y se estima que crecerán más, todavía, debido a que el Gobierno extendió el blanqueo hasta el 8 de noviembre.
La primera etapa del blanqueo fue la más favorable para los que decidan exteriorizar tenencias sin declarar hasta aquí.
El stock total de estos depósitos ya rondaría los USD 35.000 millones, según datos oficiales.
La plata del blanqueo ingresa a las Cuentas Especiales de Regularización de Activos (CERA).
El ingreso de divisas mostró una aceleración en las últimas jornadas.
Desde que Javier Milei asumió el Gobierno, los depósitos en dólares anotan un crecimiento de USD 18.400 millones, o un 130% desde los USD 14.200.
El cambio de tendencia en el ingreso de divisas ya se había insinuado tras la asunción del nuevo Gobierno y la fuerte devaluación del peso, al punto que estos depósitos pasaron a mostrar un crecimiento promedio mayor a los USD 450 millones por mes entre diciembre del 2023 y junio de este año.
De allí en más, con el empuje extra de los ingresos vía CERA, ya aumentaron en más de USD 540 millones por mes entre julio y agosto y saltaron en USD 4.800 millones durante septiembre.
En un principio, esta fase cerraba el 30 de septiembre. Sin embargo, el Gobierno decidió extender el plazo hasta este 31 de octubre, pero hoy mismo anunció que seguirá abierto hasta el 8 de noviembre, para que más personas puedan acceder a los beneficios fiscales de la primera etapa.
Para regularizar activos que están por fuera del sistema financiero formal sin caer en multas ni impuestos adicionales, es necesario tener una CERA en el Banco Central y presentar una declaración jurada.
Los contribuyentes pueden declarar hasta USD 100.000 en efectivo, sin ningún tipo de multa y a partir del 8 de noviembre la alícuota será del 10%, mientras que en la tercera y última etapa, que en principio comienza en febrero, alcanzará un total de 25%.