Dardo Romano, referente de la Cámara de la Carne en Salta, confirmó que el consumo de carne vacuna ha disminuido entre un 20% y un 25% en la provincia. Esta tendencia se refleja a nivel nacional y responde, principalmente, a la suba de precios y a la pérdida de poder adquisitivo de los consumidores.
Por su parte, Miguel Schiariti, titular de la Cámara de la Industria y el Comercio de Carnes y Derivados de la República Argentina (CICCRA), explicó que la crisis en el sector ha llevado a que Argentina comience a importar carne desde Brasil. "Argentina empieza a importar asado por los precios locales", aseguró, detallando que los supermercados de la Patagonia comenzarán a recibir estos productos en los próximos días.
Situación en Salta
Romano, por su parte, explicó que la carne vacuna ha pasado a un segundo plano en las mesas argentinas, siendo reemplazada por otras opciones más accesibles. "Se vende más carne de pollo que carne de vaca. Estamos pagando muchos años de desmanejo y decisiones erróneas", sostuvo.
Por otro lado, remarcó que un corte de blando "común" está alrededor de los 9 mil pesos y el blanco especial va desde los $11.000 a $13.000.
Sobre la importación de carne brasileña, el referente salteño se mostró escéptico respecto a su impacto en el mercado local. "No creo que cambie tanto acá. No sé si la gente se acostumbrará a comer carne de Brasil, pero hace ruido lo que está pasando. El sistema productivo de ellos es más eficiente", concluyó.