Luego de que el 8 de junio el personal técnico del Fondo Monetario Internacional (FMI) aprobara un desembolso de 4000 millones de dólares para la Argentina, hoy el board de la entidad finalmente hizo oficial la medida a través de un comunicado.
La decisión del FMI fue tomada porque el país cumplió las metas del primer trimestre. Aunque al mismo tiempo aceptó que se puedan modificar “las metas trimestrales del déficit fiscal primario y de acumulación de reservas”.
Una imagen de la sede del Fondo Monetario Internacional, ubicada en Washington. (Foto: Télam)
En aquel momento el organismo multilateral de crédito también aseguró que “se están logrando avances en las reformas que fomentan el crecimiento en consonancia con los compromisos del programa”.
En este sentido, la entidad presidida por Kristalina Georgieva detalló: “El personal técnico del FMI y las autoridades argentinas acordaron que los objetivos anuales establecidos en la aprobación del acuerdo permanecerán sin cambios. Esto es fundamental para fortalecer la estabilidad y apoyar la recuperación económica en curso”.
Los objetivos inamovibles son los de un rojo fiscal máximo del 2,5% del Producto Bruto Interno (PBI); el de una acumulación de reservas por al menos US$5800 millones; y el de lograr que la emisión monetaria no supere el 1% del PBI.
Tal como lo pidió el ministro de Economía, Martín Guzmán, ambas partes pueden negociar la modificación de las metas trimestrales en los dos mencionados puntos cruciales: el déficit y las reservas.
Con el permiso del FMI, el ministro de Economía Martín Guzmán ya puede negociar con el organismo multilateral de crédito las metas trimestrales del acuerdo entre ambas partes. (Foto: NA)
El permiso para el desvío de las metas fue en un momento clave
El permiso para el desvío de las metas trimestrales llegó en un momento clave para el Gobierno nacional, ya que la revisión del actual período abril-junio llegará recién en septiembre.
Esto se debe a que algunos analistas advierten desde hace semanas que al Banco Central le cuesta captar los dólares de la liquidación récord del agro, por la alta demanda de divisas para importar energía y otros productos.
A su vez, el déficit se incrementó durante los últimos meses. En abril, último dato oficial disponible, el rojo fiscal llegó a casi 80.000 millones de pesos y así acumuló más de $280.000 en el primer cuatrimestre.
Una imagen de Miguel Pesce, presidente de un Banco Central al que le cuesta captar los dólares de la liquidación récord del agro. (Foto: Télam/Raúl Ferrari)
En esta misma línea, los subsidios a la energía ya se habían disparado el 150% interanual por la suba de los precios internacionales derivada de la invasión rusa a Ucrania. Mientras que el gasto público también se incrementó por los bonos a jubilados y otros sectores más vulnerables frente a la alta inflación, que ya acumula el 29,3% en los primeros cinco meses del año.
Si bien no es un ítem incluido en el acuerdo con el Fondo, el precio del dólar y su frecuente volatilidad es otro de los frentes internos que preocupan a la Casa Rosada. El viernes la versión blue de la divisa estadounidense llegó a $225, el máximo valor alcanzado en su historia.