El Gobierno sigue redoblando esfuerzos para achicar el gasto público y seguir alcanzando el superávit financiero. Este viernes, la Secretaría de Hacienda publicará el resultado fiscal base caja de octubre, que el ministro de Economía, Luis Caputo, ya adelantó que continuó con un nuevo superávit financiero. El resultado fiscal base devengado mostró algunas pistas sobre lo ocurrido durante el mes: el gasto fue menor al de los dos meses previos, lo que da cuenta del renovado esfuerzo en pos del ajuste. Con atraso cambiario, la apuesta oficial para convencer a los mercados de seguir con la primaverita financiera pasa por el equilibrio de las cuentas públicas.
El superávit fiscal viene siendo la piedra basal de lo que el Gobierno se adjudica como éxitos, con visto bueno de un mercado que viene impulsando en forma sostenida mejoras en las variables financieras. Aunque no está del todo claro cómo conseguirá los dólares para sostener la estabilidad económica en el mediano y largo plazo, el déficit cero sí parece garantizar que el fisco tenga los pesos para adquirir esas divisas necesarias para pagar vencimientos de deuda en moneda dura. De hecho, esa es la regla para el Presupuesto 2025.
De ahí los crecientes esfuerzos. De cara al resultado fiscal de octubre, desde la Asociación Argentina de Presupuesto y Administración Financiera Pública (Asap), afirmaron: “En términos de nivel, el gasto del mes de octubre es menor al de los dos meses previos. En particular, se destacan los menores montos nominales respecto a septiembre en los conceptos de Bienes y Servicios ($218.644 millones vs $59.942 millones), Transferencias corrientes al sector público ($1.264.407 millones vs $993.218 millones) y Gasto de Capital ($359.475 millones vs $163.186 millones), lo que parece dar cuenta de un renovado impulso en los esfuerzos por reducir el gasto”.
Es decir, más allá de las distintas variaciones interanuales que muestra el gasto público, que dependen no solo del nivel de gasto en octubre del 2024, sino también de lo que se devengó en el mismo mes del año pasado, lo cierto es que incluso nominalmente el nivel de gasto cayó durante el mes pasado.
Lo mostró también la Oficina de Presupuesto del Congreso (OPC): mientras que el gasto total alcanzó los $7,5 billones en octubre, había sido de $8 billones en septiembre y $8,5 billones en agosto. Lo mismo para el gasto primario: $7,2 billones en octubre, $7,7 billones en septiembre y $7,4 billones en agosto. Y también se observó en el gasto corriente (deja de lado la obra pública): $7,3 billones en octubre, $7,7 billones en septiembre y $8,2 billones en agosto.
Por cierto, durante octubre, mes durante el que el escenario recesivo todavía no permitió que la economía ayudara a sumar algo de ingresos para el fisco, y en el que de hecho su contracción fue de 11,3% real, según el dato devengado publicado por la OPC, el ajuste del gasto se siguió centrando en jubilaciones (cayeron 8,3% real anual), salarios de empleados público (baja de 31,1%), transferencias a provincias (62,9%), transferencias a universidades (13,9%) y obra pública (81,2%).
En cuanto al balance base caja, Caputo ya adelantó que arrojó un resultado de idéntico signo: “En octubre vamos a estar nuevamente con un superávit financiero importante. Nadie duda del compromiso fiscal que tiene este Gobierno. Tenemos un Presupuesto que dice que los gastos se van a tener que adecuar a los ingresos. No se va a poder gastar más de lo que se recauda, como en nuestras casas”.
