Luego una acalorada reunión de la Bicameral de Trámite Legislativo, el Gobierno consiguió el dictamen para validar el decreto de necesidad y urgencia (DNU) 179 que autoriza un nuevo acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI). A partir de las 10 am buscarán aprobarlo en la Cámara de Diputados y, a priori, tienen los votos para blindarlo.
El diputado de Encuentro Federal, Nicolás Massot, y el resto de los integrantes que corresponden al bloque opositor de Unión por la Patria, no firmaron. Se tratan de los diputados Ramiro Gutiérrez, Ana Carolina Gaillard y Vanesa Siley; y los senadores Mariano Recalde, Margarita González y Anabel Sagasti. Todos jugaron todas las fichas que pudieron para que la reunión no prospere.
El dictamen se resolvió mientras los funcionarios defendían el acuerdo con el FMI, que todavía no está cerrado. Dos de los citados finalmente no fueron: Vladimir Werning (BCRA) y Leonardo Madcur (representante argentino ante el FMI). Sí fue José Luis Daza, el secretario de Economía, y a él se sumó Pablo Quirno, secretario de Finanzas; José García Hamilton, secretario legal y técnico de Economía, y Marcelo Griffi, director del BCRA; y Ariel Montenegro, síndico del BCRA.

Francisco Paoltroni destrabó el dictamen y firmó uno propio de rechazo
Todos ellos estuvieron esperando casi dos horas para comenzar a exponer porque el oficialismo se resistió a renovar las autoridades y la oposición se rehusó a comenzar con la reunión si no se votaba a un nuevo presidente. Quedó Zago a la cabeza de la comisión, aunque los libertarios quisieron primero insistir con que se mantenga el senador Pagotto. No tuvo mayoría (quedó empatado), nuevamente, por Paoltroni: él tenía la llave para inclinar la balanza y fue quien propuso al diputado del MID. Lo votó incluso Almirón, quien casi se iba a los golpes con Zago la semana pasada.
Sin un nuevo Presidente, no hubiese sido posible avanzar hacia un dictamen. El Gobierno lo necesitaba porque, con la sesión de mañana agendada y sin posibilidad de que se posponga, si faltaba el dictamen de la Bicameral la oposición iba a pedirles dos tercios para votar la validez del DNU. Esto se debe a que, si bien no hace falta que haya un dictamen para tratar un DNU, la ley especifica que la comisión tiene un plazo de diez días hábiles para expresarse. Ese plazo se vencía recién la semana que viene.

Los funcionarios exponiendo en la reunión de la Bicameral
En cambio, con dictamen de la Bicameral, las Cámaras pueden abocarse inmediatamente. El Gobierno confía en que tiene los votos para aprobarlo en Diputados y, al necesitar solamente el aval de una Cámara, con esto blindaría el acuerdo. Los 129 que necesitan están más que asegurados se estima que sobrarán.
A los 39 violetas se va a sumar la totalidad de los 20 radicales de Rodrigo De Loredo, motivados principalmente por haber votado a favor del acuerdo del exministro Martín Guzmán en 2022. El PRO acompañan casi todos, aunque hay dudas sobre el larretista Álvaro González. A ellos se suman la tucumana del monobloque CREO, Paula Omodeo, y las sanjuaninas de Producción y Trabajo, que acompañaron el pedido de sesión.
Más los 3 del MID que comanda Zago; los 6 de la Coalición Cívica; los 3 tucumanos de Independencia; los 8 de Innovación Federal que responden a Salta, Misiones y Río Negro; y Lourdes Arrieta, la exlibertaria de FE.
Se estima que al menos 8 de Encuentro Federal, incluido el jefe de bloque, Miguel Ángel Pichetto, den luz verde: los cordobeses, el chubutense Jorge Ávila y el enterriano Francisco Morchio. Con el monobloque del neuquino Osvaldo Llancafilo y el santafecino Mario Berletta, llegan a 129.
También podrían sumar un par de los radicales del bloque de Facundo Manes, Democracia Para Siempre, la santafecina Melina Giorgi y la entrerriana Marcela Antona, los únicos que responden a gobernadores. UxP además podría aportar sus números por la influencia de Raúl Jalil, que dirige a cuatro catamarqueños, y a Gerardo Zamora, que mueve otros siete santiagueños. Esto podría pasar aunque el bloque opositor se encargó de difundir comunicados y hasta una nota al propio FMI en contra del DNU.
El dictamen se destrabó gracias al senador Francisco Paoltroni, el formoseño que se fue del bloque libertario tras fuertes desacuerdos con el oficialismo. Su posición se mantuvo incierta hasta último momento y finalmente decidió colaborar con un dictamen propio de rechazo. Él defiende que el acuerdo debería haberse tratado vía proyecto de ley.
Con él consiguen las 9 firmas requeridas para avanzar con el despacho de comisión. También firmaron los aliados del Gobierno: los radicales Francisco Monti (diputado) y Víctor Zímmermann (senador); del PRO, Diego Santilli (diputado) y Luis Juez (senador); el correntino Carlos “Camau” Espínola (senador); del MID, Oscar Zago (diputado), flamante presidente de la comisión; y de la Libertad Avanza, Lisandro Almirón (diputado) y Juan Carlos Pagotto (senador).