En su desesperada búsqueda de votos, Sergio Massa pretende que las Pymes paguen por los platos rotos que él destrozó, lanzando una sería de medidas que causaron un fuerte revuelo por el pago de un bono de $60.000 a empleados privados y públicos. El sector que primero reaccionó fue el del comercio.
"Va a haber comercios que no van a poder pagar el bono", afirmó ayer el presidente de la Cámara de Comercio e Industria de Salta, Gustavo Herrera, en diálogo con Radio Salta.
"Lo que nos regula la relación con nuestros empleados son las paritarias, para eso están; es donde se definen los aumentos y nosotros cumplimos. Pero cuando aparecen estas relaciones de bonos realmente se le complica al empresario", señaló.
Según el Ministerio de Trabajo, las pymes serán ayudadas a pagar el bono. "Si todo esto es absorbido por el Estado para nosotros sería muy bueno, porque los costos laborales son muy altos y para el sector sería imposible de pagar", dijo la tesorera de la Cámara Pymes de Salta, Miriam Guzmán.
Para el sector agroexportador, Nación estableció un nuevo valor del dólar para los sojeros, que llegaría a $437,50, es decir, 25% por encima del dólar oficial.
El presidente de Prograno, Francisco Vidal, opinó: "Seguimos con más parches que no resuelven nada, al contrario, distorsionan, y empieza a tornarse todo un negocio de especulación", según consignó El Tribuno.