La economía argentina entró en el peor de los escenarios: sufre de una fuerte recesión al mismo tiempo en que se desarrolla la explosión inflacionaria de los precios. El INDEC confirmó que el índice EMAE de actividad económica se contrajo un 0,2% en junio con respecto al mes anterior, y hasta un 4,4% en comparación con el mismo período del año pasado.
Se trata de la cuarta caída mensual consecutiva de 2023, y ya se acumulan 11 meses de una fatídica recesión que comenzó en agosto del año pasado, precisamente cuando Sergio Massa se hizo cargo del ministerio de Economía.
Desde que Massa asumió como Ministro la actividad se contrajo hasta un 4,27% con respecto a julio de 2022. Se debe tener en cuenta que estos datos no incluyen la devaluación del mes de agosto, la cual habría profundizado gravemente el proceso recesivo.
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— INDEC Argentina (@INDECArgentina) August 23, 2023
La actividad económica cayó 4,4% interanual en junio de 2023 y 0,2% respecto de mayo https://t.co/9QwwymZpfV pic.twitter.com/VK1bw33Tac
La economía se anotó la cuarta caída consecutiva en lo que va del año, como parte de una fase recesiva que comenzó en agosto de 2022. La producción industrial cayó un 3,6%, mientras que el sector agropecuario se contrajo más de un 40% interanual por la sequía.
La economía argentina entró en el peor de los escenarios: sufre de una fuerte recesión al mismo tiempo en que se desarrolla la explosión inflacionaria de los precios. El INDEC confirmó que el índice EMAE de actividad económica se contrajo un 0,2% en junio con respecto al mes anterior, y hasta un 4,4% en comparación con el mismo período del año pasado.
Se trata de la cuarta caída mensual consecutiva de 2023, y ya se acumulan 11 meses de una fatídica recesión que comenzó en agosto del año pasado, precisamente cuando Sergio Massa se hizo cargo del ministerio de Economía.
Desde que Massa asumió como Ministro la actividad se contrajo hasta un 4,27% con respecto a julio de 2022. Se debe tener en cuenta que estos datos no incluyen la devaluación del mes de agosto, la cual habría profundizado gravemente el proceso recesivo.
De acuerdo a los datos del INDEC, el sector agropecuario registró una fuerte caída interanual del 40,4% con respecto a junio del año pasado, debido al impacto de la sequía. Esto contribuyó a agravar la recesión, pero no a explicarla por completo.
La producción industrial se desplomó un 3,6% interanual en junio de 2023, contribuyendo a la caída general en 0,6 puntos porcentuales. Las restricciones cuantitativas a las importaciones paralizaron completamente al sector, ya que es fuertemente dependiente de insumos que se fabrican fuera del país. Las Licencias no Automáticas (LNA) se vuelven cada vez más restrictivas a medida que el Banco Central se queda sin dólares.
Por otra parte, los servicios de electricidad, gas y agua sufrieron una caída del 7% interanual, mientras que la intermediación financiera se contrajo un 1,2% en el mismo período. El sector del transporte y comunicaciones llegó a registrar una caída interanual del 3%.
Aunque el ministro Massa y el secretario de Industria José de Mendiguren siguen hablando de “crecimiento”, la economía entró en una feroz recesión. El nivel de actividad ya es el más bajo registrado desde julio de 2019.
Asimismo, si se corrige el EMAE por el crecimiento de la población desde 2019, el ingreso promedio por habitante ya se encuentra en niveles más bajos de los que había en diciembre de 2019 pero con más del doble de inflación interanual.
