La desaceleración que mostró la inflación en el último tramo del 2022 duró poco y, en el inicio del nuevo ciclo, volvió a presionar sobre los salarios al colocarse en torno al 6% mensual; la fuerte incidencia del rubro alimentos y precios regulados comienza a impactar en el consumo de bienes y servicios en los hogares.
En febrero, el Indicador de Consumo (IC) que elabora la Cámara Argentina de Comercio y Servicios (CAC) mostró un avance de 0,8% en la comparación interanual (i.a.), sin embargo, marcó un retroceso desestacionalizado de 1,7% frente al mes de enero.
"Este magro crecimiento interanual visto en febrero da continuidad al proceso de retroceso exhibido por el IC desde mediados del 2022 y su posterior estancamiento", describe el informe y advierte que el resultado es "consistente" con una macroeconomía "en tensión".
En ese sentido apunta que "la capacidad de compra de los hogares argentinos mostró una nueva contracción en el segundo mes del año". De hecho, aclara que, el IC se ubicó en febrero más de 1% debajo de la comparación con la prepandemia.
"Si se analiza el desempeño de algunos rubros de consumo en particular, se observa una dinámica compartida de desaceleración del crecimiento interanual a partir de la segunda mitad de 2022, junto con las primeras señales negativas en algunas categorías", alertaron desde la CAC.
Paritarias contra precios
En este contexto, los gremios comenzaron a renegociar salarios en marzo para evitar perder contra una inflación que se aleja de la pauta oficial de 60%. Según el índice salarial del sector privado relevado por Ecolatina 16 de los 20 gremios analizados tienen aumentos estipulados hasta marzo.
Luego de mostrar un saldo positivo de 5%, en el nivel de ingreso general, frente al Índice de Precios al Consumidor en diciembre, "la brecha mensual entre los salarios y la inflación podría ser la mayor de los últimos meses", anticipa un documento de Ecolatina.
Frente a los trabajadores formales que encuentran un rescate en distintas compensaciones no remunerativas, como Camioneros que recibió un bono de $100.000, el sector informal -que perdió 7,5% el año anterior -junto a las jubilaciones y prestaciones de la Anses, serán los más golpeados.
Escape electoral
Mientras las estimaciones de ingreso de divisas del agro caen -en torno a los u$s 20.000 millones-; con menos dólares para pagar importaciones y el gasto del sector público pisado por la presión del Fondo Monetario Internacional (FMI), el Gobierno buscará evitar que la recesión pegue en el consumo privado, que representa el 70% del PIB.
"El Gobierno sabe que evitar una caída del salario real del sector formal será vital", planteó el informe de Ecolatina.
En contraste con el fin del "consumo revancha" que propició la postpandemia, la falta de "destinos" para los pesos frente al endurecimiento del cepo cambiario que se combina con un alto costo para el asalariado argentino y tasas de interés que volvieron a ser negativas para la inversión, es un aliciente para el comercio minorista.
Por eso, las estimaciones privadas indican que una salida "fácil" a los desvalorizados pesos continuará siendo destinarlos al consumo de bienes y servicios.
En ese punto indican que la apuesta por sostener el salario real "hasta donde se pueda" será el objetivo que el Gobierno se trazará en la previa electoral.
Sector por sector
De acuerdo a los datos que mide la CAC el rubro de indumentaria y calzado mostró en febrero una caída estimada de 16,8% i.a. y se ubicó más de un 20% por debajo de los niveles vigentes previo a la pandemia.
Por otro lado, el capítulo de transporte y vehículos mostró un crecimiento estimado del 3,2% i.a. en febrero, ubicándose sin embargo en valores casi 4% debajo en la comparación con la prepandemia.
Recreación y cultura aún muestra tasas de crecimiento significativas, con un avance estimado de 26,2% i.a. en febrero, como consecuencia de las abruptas caídas vistas a raíz de la pandemia y un proceso de reapertura y recuperación que fue más lento que en otros sectores.
En cuanto al apartado de vivienda, alquileres y servicios públicos, se detectó un avance estimado de 4,8% i.a. en el segundo mes del año, ubicándose más de 15% por encima de los niveles previos a la crisis sanitaria.
Con respecto al resto de los rubros, en conjunto, experimentaron una contracción estimada del 2% i.a. en febrero, posicionándose en niveles de más del 5% debajo de la comparación con 2019.