Esta semana se conocieron dos datos oficiales sobre la evolución salarial en 2023 y ambos confirmaron el rezago de los ingresos frente a la inflación, que acumuló 211,4% en 12 meses. Los analistas, además, anticipan que la tendencia continuará este año.
Primero, el ministerio de Trabajo publicó el índice Ripte que da cuenta de la Remuneración Imponible de los Trabajadores Estables en diciembre. Este viernes, en tanto, el INDEC difundió el índice de salarios para el último mes del año pasado.
Según el Ripte, que publica la secretaría de trabajo, la remuneración promedio de los trabajadores estables llegó en diciembre a $484.298,40 y se ubicó $11.500 por debajo de los $495.798 que, según el INDEC, necesitó una familia de cuatro personas para superar la línea de pobreza en ese mismo mes.
“La caída del salario real en diciembre fue brutal. El índice RIPTE cayó en términos reales un 13,7% solo en un mes, la más importante de la serie que arranca en 1994. Está en niveles de septiembre de 2003 y en enero apunta a perforar los mínimos históricos de 2002″, señaló Luis Campos, investigador del Instituto de Estudios y Formación de la CTA - Autónoma, en su cuenta de X.
A lo largo de 2023, el Ripte avanzó 149,4% frente a una inflación de 211,4%. Las estimaciones de los economistas sobre la pérdida salarial real -por efecto de la inflación- rondan el 20%. Según el economista Fernando Marull, socio de FM&A, esa caída está debajo de la fuerte retracción del consumo que se registró en enero. Por ejemplo, el indicador de ventas minoristas, que informa la Cámara Argentina de la Mediana Empresa, mostró una caída de 28,5% anual.
“No es de sorprender, cuando en diciembre el salario promedio (Ripte) subió solo 8,3% mensual, contra la inflación de 25,5%; y a nivel anual perdió 23% real. La recuperación salarial esperamos que sea paulatina (en febrero empatarían al 15% de inflación) y recién a partir de marzo se consolidaría. El RIPTE de $484.000 de diciembre es el nivel más bajo desde abril de 2005″, explicó Marull.
Los datos del índice de salarios del INDEC no distaron mucho de lo que ya había anticipado el RIPTE, pero dan algunos datos desagregados sobre diferentes sectores. A nivel general, el indicador avanzó 8,9% en diciembre y 152,7% en 2023.
La evolución por tipo de trabajo fue diferente, pero todos los grupos se quedaron detrás de la inflación:
- Los sueldos de los trabajadores registrados del sector privado avanzaron 11% en el último mes del año pasado y 165,8% en todo 2023.
- Las remuneraciones de los empleados públicos registrados, en tanto, subieron 5,5% en diciembre y 148,6% a lo largo del año pasado.
- Los salarios del sector privado informal tuvieron la peor evolución, con un alza de 7,6% en el último mes y 115,3% en todo 2023.
El Gobierno convocó al Consejo del Salario
Por su parte, el salario mínimo, vital y móvil está congelado en $156.000 desde diciembre del año pasado. En 2023, ese indicador aumentó solo un 138,4% y perdió contra la inflación. La variación también afecta a los beneficiarios del programa Potenciar Trabajo, que cobran la mitad de un salario mínimo.
Desde que asumió la nueva administración, se esperaba por la convocatoria al Consejo del Salario, una instancia en la que dialogan representantes de los trabajadores, empleadores, el estado nacional y los gobiernos provinciales para determinar el monto de ese piso salarial.
Aunque el Gobierno había dicho que llamaría a las partes a fin de enero, finalmente esta semana publicó la convocatoria para el jueves 15 de febrero. El secretario de Trabajo, Omar Yasin, había dicho el salario mínimo, vital y móvil necesitaría un incremento de un “porcentaje bastante considerable”.
En ese contexto, la CGT ya adelantó que pedirá una actualización “de al menos 85%” debido a la devaluación y la “brutal inflación acumulada” entre diciembre de 2023 y febrero de este año “sobre todo en insumos de canasta básica de alimentos y salud”. Si esa solicitud fuera escuchada, el salario mínimo, vital y móvil llegaría a $288.600 mensuales.