A partir de octubre de 2024, la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) comenzará a implementar controles más estrictos sobre las transferencias bancarias. Esta medida busca combatir la evasión fiscal y el lavado de dinero, y afectará principalmente a quienes realicen grandes transacciones a través de homebanking o billeteras virtuales.
Si bien los trabajadores registrados o monotributistas no deberían tener problemas, las personas sin ingresos formales deberán estar preparadas para justificar el origen de los fondos.
¿Cuál es el nuevo límite para transferencias desde octubre?
Desde el próximo mes, cualquier transferencia bancaria que supere los $400.000 será objeto de control por parte de la AFIP. Esta inspección no solo se aplicará a los ingresos de dinero, sino también a las salidas. Es decir, si envías o recibís más de esa cantidad, deberás justificar el origen de los fondos mediante documentación respaldatoria, como facturas, contratos o recibos.
- El límite de $400.000 también incluye a quienes realicen pagos a través de billeteras virtuales, un método cada vez más utilizado en el país. Si se supera esa cifra en una operación, será necesario tener en orden todos los documentos que respalden el movimiento de dinero.
¿Quiénes serán afectados por esta medida?
Este control está dirigido principalmente a personas sin ingresos formales. Es decir, aquellos que no están registrados como monotributistas, responsables inscriptos o no perciben salarios declarados ante el fisco. Para estas personas, cualquier transferencia superior al nuevo límite deberá ser justificada.
Por otro lado, aquellos que tienen ingresos formalmente declarados no deberían tener problemas con estos controles, ya que sus movimientos están previamente informados a la AFIP a través de sus declaraciones juradas o recibos de sueldo.
Documentación requerida por la AFIP
Si realizás una transferencia que supere los $400.000, la AFIP podría pedirte que justifiques el origen de los fondos. La documentación que se suele solicitar incluye:
- Facturas de bienes o servicios.
- Recibos de pagos realizados.
- Contratos que expliquen la transacción.
- Declaraciones juradas de ingresos y egresos, en caso de personas físicas o empresas.
- Registros contables, en el caso de las empresas.
Consecuencias de no poder justificar una transferencia
Si la AFIP detecta una transferencia sospechosa y no podés justificarla, las consecuencias pueden ser severas. En primer lugar, se podrían enfrentar multas y ajustes fiscales. En casos más graves, el banco puede emitir un Reporte de Operación Sospechosa (ROS) y notificar a la Unidad de Información Financiera (UIF), lo que podría derivar en una investigación por lavado de dinero.
Por eso, es fundamental que, si planeás realizar una transferencia importante, tengas a mano toda la documentación necesaria y mantengas tus finanzas organizadas para evitar sanciones.