“Con el cepo no tenemos una meta de fechas”, señaló el ministro de Economía, Luis Caputo, en el 41° Congreso Anual del IAEF, consultado acerca de cuándo se eliminarán las restricciones cambiarias. “Si lo hubiéramos sacado en enero, hubiese sido una calamidad. Si sacáramos el cepo hoy, sería inapropiado”, señaló.
Caputo explicó que existen cuatro requisitos para quitar el control de cambios: “un ancla fiscal, normalizar el flujo, normalizar el stock, y tener una relación razonable entre las reservas internacionales y los pasivos remunerados; esto último se podría resumir con el saneamiento del balance del Banco Central”. Si bien la normalización a su juicio se logró “en un 70 o 75%”, Cauto reconoció en el último punto “es en el que más alejados estamos”.
“Uno no pasa del populismo al liberalismo en una línea recta, todo es una cirugía mayor”, dijo y aseguró: “Vamos a levantar el cepo en el momento en que estemos seguros que no va a haber sobresaltos”.
Si la Argentina ingresara en un nuevo acuerdo con el FMI que le genere nuevos desembolsos, dijo el ministro, se alcanzaría esa “relación razonable” entre pasivos remunerados y reservas del Central. “En definitiva es lo que hemos venido haciendo estos cuatro meses. El BCRA ha comprado 16 billones y un poco más de reservas y hemos logrado comprimir la base amplia un 44%”, explicó.
“Estamos empezando ahora a trabajar en un nuevo programa. Hicimos la revisión del programa anterior y ahora vamos a empezar lo que es la segunda etapa del programa, que incluye este tema”, agregó.