El Ministerio de Economía anunció que se extremarán los controles sanitarios en las importaciones avícolas para prevenir el ingreso de la gripe aviar al circuito comercial local. Además se reforzará la labor del Senasa con personal y equipamiento. El objetivo es que el país mantenga su estatus sanitario y el normal flujo de exportaciones.
Así lo informaron este martes a través de un mensaje grabado el ministro de Economía, Sergio Massa; el secretario de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, Juan José Bahillo; la presidenta del Senasa, Diana Guillén; y el vicepresidente del Senasa, Rodolfo Acerbi.
En detalle, Economía dispuso extremar las medidas para las importaciones de genética y productos avícolas con el fin de evitar que la Influenza Aviar (IA) ingrese al circuito comercial. Además se acordó reforzar al Senasa con la incorporación de personal; compra de vestimenta adecuada, insumos para laboratorio, equipos, refuerzo de fronteras rodoluvios, entre otros.
“Es importante señalar que mientras la Influenza Aviar se encuentre en aves silvestres y de traspatio; Argentina podrá preservar el estatus sanitarioy el normal flujo de exportaciones. Es por eso que el Gobierno Nacional refuerza el plan de acción para evitar que la enfermedad ingrese al circuito comercial”, explicaron desde el Palacio de Hacienda.
Las nuevas medidas anunciadas se suman a las ya implementadas en el marco de la emergencia sanitaria declarada por el Senasa, a través de la resolución 147/23: rastrillaje de las zonas de los focos en aves silvestres y traspatio para identificación de otras aves enfermas; refuerzo de los controles y las acciones de vigilancia epidemiológica en los puestos de frontera, en todos los pasos fronterizos, con Chile, Bolivia y Uruguay; desinfección de vehículos, control de pasajeros; movilización de agentes especializados en aves y manejo de emergencia de otras dependencias o centros regiones del Senasa, hacia las oficinas ubicadas en las fronteras; continuidad en las campañas de sensibilización para notificación tempana; concientización, capacitación y recomendaciones para el esfuerzo en las medidas de bioseguridad en granjas comerciales; y articulación junto con otros entes públicos en la vigilancia y en el control del movimiento de aves, productos y subproductos de aves.
También resaltaron que toda la tarea preventiva se desarrolla a través de un trabajo articulado con los Ministerios nacionales de Seguridad y Salud, Parques Nacionales, los gobiernos provinciales y municipales, el sector productivo y los colegios veterinarios.
Actualmente, ante la detección de casos se realizan relevamientos de las instalaciones y condiciones de las zonas o establecimiento donde fueron hallados los animales; delimitación de un perímetro alrededor del lugar del foco para rastrillar y verificar posibles aves muertas o con sintomatología compatible con la enfermedad; consulta a vecinos, dueños de los establecimientos, o autoridades ambientales de las provincias, quienes realizaron las notificaciones ante las sospechas por mortandad o sintomatología en aves; establecimiento de puestos de control para evitar el ingreso y egreso de animales enfermos o personal que las haya manipulad recientemente.
Mientras que en el caso de las aves de traspatio, se interdicta el predio y se procede al sacrificio sanitario de las aves que hubieran estado en el lugar donde se determinaron las mortandades y las muestras positivas.