Reina la incertidumbre en los comerciantes grandes y chicos del centro salteño, muchos comenzaron a remarcar precios, otros directamente señalaban que las cosas no tenían precios y hasta se vio lugares donde se dejó de vender al público.
Lo que se podía observar con solo salir a la calle es que nada tenía precio. Todos los productos están afectados por las subas que superan el 10% en una semana. No hay precio porque hay "incertidumbre", decían los comerciantes. El serio problema es que detrás de las remarcaciones vendrá una escalada terrible de la inflación.
En plaza 9 de Julio algunas confiterías quitaron ayer los precios porque ya no saben cuánto cobrar. Y se entiende dando un ejemplo. La cervecera local aumentó un 5 por ciento sus productos la semana pasada, y para esta ya anunciaron otro 5 por ciento. Los comerciantes no saben a cuánto vender porque no saben a cuánto deberán reponer la mercadería. Mucho menos cuando la cerveza es importada, que en una confitería o bar puede llegar costar 2.000 pesos el litro.
En otro sector, en los comercios de repuestos de la San Martín sucede lo mismo. Los proveedores no van a vender hasta que no se estabilice la situación. "Incertidumbre; esa es la palabra. De 40 proveedores de repuestos con los que trabajo, 20 hoy (por ayer) no me quisieron vender mercadería porque no tienen precio. Antes venían los preventistas a ofrecerme los repuestos y me daban beneficios. Hoy tengo que rogar para que me vendan un radiador", dijo un propietario. El comerciante asegura que las listas de precios de repuestos se fueron actualizando diariamente, un total del 10 por ciento en una semana y ayer ya no le quisieron vender.
Aseguró que los repuestos alternativos cotizan con blue y los repuestos originales con el dólar oficial. El resultante es que los alternativos ya están a los mismos valores que los originales, cuando históricamente los alternativos costaban la mitad.
Otro alto jefe de un mayorista de la avenida Paraguay coincide con que el escenario de "incertidumbre" le da dinámica a la inflación. Pero tiene un detalle: "El dólar blue es una mercancía más. El dólar billete en mano cotiza a la suba como la leche, el pan o cualquier mercadería.Y ahora la inflación tiene más dinámica que nunca, todos los días tenemos aumentos en todos los rubros, tal cual como viene subiendo el dólar ilegal. Entonces el origen de las subas no es el blue, que es un producto más. El problema es la incertidumbre que el Gobierno nacional y la oposición le dan a un escenario de inestabilidad porque no sabemos a dónde vamos; no tenemos rumbo", dijo el gerente.
En tanto, ayer corrieron imágenes de un supermercado que había cubierto productos de distintos rubros para no vender al público. Allí señalaban que hoy se normalizaría.
En el rubro turístico, las agencias reciben dólares para la venta de paseos y excursiones. Cotizan sus precios al blue. "A Iruya cuesta 250 dólares, para 4 personas, salida y regreso en el día", dijo una promotora en una agencia de turismo sin ponerse colorada.
Los neumáticos ya se actualizaron los precios al 18 por ciento en una semana. En corralones y ferreterías aseguran que el viernes de la semana pasada le actualizaron un 10 por ciento la lista de productos, pero que piensan subir más el precio a los consumidores finales porque se vendrá una nueva actualización en esta semana.
Así, las cosas, los propietarios, gerentes y empresarios anuncian que el peor síntoma es la falta de precios con su consecuente suspensión de reposición de mercaderías. Todos coinciden en que cuando eso pasa es porque "hay una bomba que va a explotar".
Fuente El Tribuno