Peluqueros, cartoneros, albañiles, mozos… El mundo del trabajo informal es tan amplio como heterogéneo. A la fecha, según los últimos datos oficiales disponibles, este universo sigue sin recuperar su poder de compra. Estos son los datos que explican, en parte, el día de marchas que culmina este jueves en Buenos Aires y la necesidad de pensar un nuevo bono o solución “parche” cada semestre.
En otras palabras, casi uno de cada tres trabajadores argentinos sigue perdiendo contra la inflación. En el primer trimestre de 2022, bastante más que los trabajadores formales: sus salarios avanzaron 10,7%, casi seis puntos por debajo de la inflación acumulada en el mismo período (16,1%).
El dato que se conoció este martes con la publicación del Índice de Salarios del INDEC refuerza la tendencia evidenciada en 2021. El año pasado, el salario de los trabajadores informales solo creció 40,6%, contra una inflación del 50,9%.
Las organizaciones sociales nuclean a gran parte de estos trabajadores informales. El universo de 1,2 millón de personas que cobra el Potenciar Trabajo, el programa de asistencia que otorga medio salario mínimo a cambio de trabajo a tiempo parcial, es también parte de este grupo y, muchas veces, complementan ese ingreso con alguna changa.
Lo que diferencia a los que cobran el Potenciar Trabajo del resto de los trabajadores informales es que, de algún modo, tienen su propia “paritaria”. Como el monto que cobran depende del salario mínimo vital y móvil (es la mitad de esa cifra), aumenta conforme suba el SMVyM. El adelantamiento de las subas hará que, hacia agosto, el plan sea de $23.925.
Por qué cae tanto el salario informal
María Castiglioni, socia de C&T Asesores Económicos, explica las razones detrás de la fuerte caída del salario real en el trabajo informal, a pesar de que suele ser el sector más dinámico del empleo. “Lo que está ocurriendo es una flexibilización laboral de hecho en muchos empleos informales”, detalla.
“Parece difícil que en 2022 se vaya a recuperar el sector. Lo que refleja es la verdadera situación del mercado laboral: no cae la cantidad de personas que trabajan en el empleo informal, pero sí ajusta por el ingreso”, concluye la economista.
En ese sentido, Ricardo Delgado, socio de Analytica, señala que lo que sucede con los salarios informales es “la demostración más clara de que hay un mercado laboral dual”.
Es decir, por un lado, el sector formal, que corre “más o menos a la par con la inflación”. Por el otro, un 40% de la fuerza laboral integrada por trabajadores informales, monotributistas y autónomos que “no tienen posibilidad de discutir paritarias porque no tienen protección sindical”.
En el contexto de aceleración de la inflación, añade el economista, “las pérdidas de ingresos reales van a ser todavía mayores”. Apunta que la dualidad del mercado laboral probablemente se profundice a medida que se aceleran los precios.