El directorio del Fondo Monetario Internacional (FMI) aprobó la séptima revisión del acuerdo de Facilidades Extendidas.
Esta instancia habilitó el envío de US$4700 millones con los que ya se saldaron los compromisos pendientes de enero y febrero, pero también impuso una serie de nuevas condiciones que la Argentina debe seguir para cumplir con el programa.
“Nuestro objetivo es eventualmente unificar el tipo de cambio y eliminar los controles cambiarios, según lo permitan las condiciones. Con este fin, estamos acelerando el trabajo en el desarrollo de una hoja de ruta para la eliminación gradual de los controles cambiarios (reiniciada hasta finales de junio de 2024, meta estructural), que deberá calibrarse cuidadosamente, dependiendo del progreso en la implementación de nuestro plan de estabilización”, se puede leer en el informe que el staff del FMI presentó al directorio del organismo.
Las nuevas metas estructurales del acuerdo con el FMI, según el reporte, son seis:
Publicar a finales de mayo de este año reformas detalladas del actual esquema de segmentación tarifaria para orientar mejor los subsidios a la canasta básica de energía para los hogares vulnerables.
Perfeccionar el marco y las operaciones de la política monetaria, para garantizar que esté bien anclado con objetivos de mediano plazo claros y bien comunicados, consistentes con la estabilidad de precios. Esta meta se pactó para finales de abril de 2024.
Eliminar el esquema de exportación preferencial existente hacia finales de junio de 2024.
Hacia septiembre de 2024, fortalecer la integración de bases de datos administrativas relevantes para mejorar la focalización y la prestación eficiente de asistencia social, con asistencia técnica del Banco Mundial.
Presentar al Congreso el Proyecto de Presupuesto 2025 consistente con el objetivo general de equilibrio fiscal, lo que se hará el 15 de septiembre de 2024, tal como establece la ley.
Desarrollar y ejecutar un plan destinado a extender los vencimientos de una parte de la deuda interna que vence este año. El Gobierno se comprometió a realizar esto a finales de marzo de 2024.
“Además -sigue el reporte- se propone restablecer la meta estructural existente sobre el desarrollo y publicación de una hoja de ruta para la flexibilización gradual de los controles cambiarios”. Esto estaba previsto anteriormente para fines de marzo y ahora se hará al final de junio.