Mientras se espera por definiciones con respecto al juicio por la expropiación de YPF, la jueza de Nueva York Loretta Preska falló en contra de la Argentina en un reclamo de fondos buitres que todavía no cobraron los bonos que cayeron en default durante 2001.
La magistrada les dio la razón a los reclamantes, los fondos Bybrook Capital Master y Bybrook Capital Hazelton, que ahora son acreedores de US$142 millones, según la sentencia de primera instancia. A pesar de ello, lo más probable es que la Argentina no apele porque es probable que pierda: no hay dudas de que el país incumplió sus pagos en 2001. Precisamente por eso hubo tres canjes de esa deuda -en 2005, 2010 y 2016- y más del 90% de los fondos adhirieron.
Sin embargo, siempre quedan algunos litigantes que no entran en los acuerdos propuestos por el país y continúan con el juicio. Una fuente que conoce los manejos en las cortes internacionales explicó a TN que ese tipo de fondos prefieren condenas que se dilaten en el tiempo. Para el país, en cambio, la resolución de la jueza es una buena noticia.
¿Por qué? Porque al momento de pagar, la Argentina debe abonar el capital y los intereses del bono, pero estos últimos se actualizan con una tasa anual de 9% hasta tanto haya un fallo. Una vez que hay sentencia, como sucedió ahora, la tasa de interés pasa a ser la de los bonos del Tesoro de los EEUU a dos años, que hoy está en torno al 4%.
Sin el camino de la apelación a la vista, los demandantes tienen algunas alternativas. Por un lado, buscar activos embargables de la Argentina en Estados Unidos como una forma de cobrar la sentencia. Ese camino -que es el más probable- es el que están siguiendo los fondos que demandan al país por la expropiación de YPF y por el momento no tuvieron éxito.
La otra posibilidad sería esperar a que la Argentina les ofrezca alguna clase de acuerdo, teniendo en cuenta que la cifra es menor en comparación con todo el monto que cayó en default y que saldarlo le permitiría cerrar un frente judicial. Sin embargo, aún si el Gobierno quisiera ir por esa vía, tendrá que conseguir el aval del Congreso. Sería un momento incómodo para las autoridades tener que admitir que pretenden gastar en terminar una demanda mientras internamente hay un fuerte ajuste.
A la espera de definiciones por YPF
La jueza Preska también condenó a la Argentina a pagar US$16.100 millones por el trato desigual a los accionistas minoritarios de YPF al momento de la expropiación. Los beneficiarios del fallo intentaron proceder con los embargos, pero no lo lograron.
Ahora, su estrategia se concentra en intentar demostrar que otras entidades -como Banco Nación, el Banco Central o Arsat- son “alter egos” de la Argentina para ir tras sus bienes en el proceso de embargos. Por ahora, la magistrada consideró que YPF y el estado nacional son “lo mismo” y ordenó que se presente la documentación pertinente para corroborarlo.