Si nunca habías pensado en la posibilidad de disfrutar de un delicioso cheesecake con solo tres ingredientes, te entendemos, y es que tampoco nos lo hubiéramos imaginado.
Pero esta receta es la prueba de que lo imposible a veces es posible, y la mejor parte, es que podés usar ingredientes mucho más saludables que en su versión clásica. ¡Manos a la obra!
Ingredientes
3 huevos
225 gramos de queso crema
70 gramos de miel
Procedimiento
Paso 1: Empezá separando las claras de las yemas. Colocá las claras en el bowl de la batidora y batilas hasta que lleguen a punto de nieve. Para saber que están listas, dale vuelta al bowl y, si estas resbalan, falta seguir batiendo.
Paso 2: Reservá aparte las claras y en el mismo bowl de la batidora vertí las yemas junto con la miel o el edulcorante de tu preferencia.
Paso 3: Batí a máxima velocidad con el accesorio de globo de tu batidora, hasta que llegue a punto cinta o letra, es decir, después de 10 minutos de batido continuo. La mezcla se debe ver como una espuma blanquecina espesa que cuando la levantas y dejas caer, se mantiene el trazo notoriamente por un par de segundos. Ahora, reservá la mezcla.
Paso 4: Suavizá el queso crema a temperatura ambiente. Para hacerlo, batilo hasta que tenga la textura de una pomada.
Paso 5: Añadí el queso crema a la mezcla de yemas y batí hasta que se integre o que no se vean grumos.
Paso 6: Integrá las claras a punto de nieve en tres o cuatro tandas, dando movimientos envolventes con una espátula de goma hasta que se vea una crema homogénea.
Paso 7: Vertí la crema en un molde circular con un disco de papel manteca en la base. Si el molde es desmontable o tiene ranuras, forrá el exterior del molde con papel aluminio.
Paso 8: Por último, colocá el molde dentro de una bandeja alta y llenala con agua caliente hasta la mitad para hornear al baño María a 175 °C durante una hora.
Paso 9: Cumplido el tiempo de cocción, procede a apagar el horno y deja que el cheesecake se entibie, no te preocupes si ves que se desinfla. Finalmente, retirá la tarta de queso del horno, deja que enfríe y refrigera hasta el día siguiente.
Paso 10: Al día siguiente, desmoldalo. Para hacerlo, pasa una espátula por el borde para despegar la tarta del molde y cubrí el cheesecake con un trozo de papel film. Luego, colocá un plato o una bandeja de cabeza encima y da vuelta al molde junto con el plato, dejando que la tarta caiga al plato y retira el disco de papel manteca.
Para terminar, colocá un plato o una bandeja encima y rápidamente volvé a darle la vuelta. Retira cuidadosamente el papel film y serví inmediatamente.