Las pepas son pequeñas delicias que conquistaron el corazón de los amantes de los postres. Estas galletitas tradicionales, conocidas por su forma característica y su suave textura, son un clásico en muchas concinas pasteleras.
Su receta única y versátil, convierte a las pepas en el acompañamiento perfecto para la hora de la merienda, con una taza de té o café.
Ya sean simples y espolvoreadas con azúcar, rellenas de dulce de leche o membrillo, las pepas son un regalo para el paladar que nos transporta a momentos de compartir y disfrutar. Enterate cómo hacerlas sin harina, paso a paso.
Ingredientes
Vas a necesitar 1 taza de almendras molidas.
Sumá 1/4 de taza de azúcar (podés usar azúcar de coco o stevia si preferís).
Agregá 1 huevo.
También necesitás 1 cucharita de esencia de vainilla.
Incorporá 1 pizca de sal.
Opcionalmente, vas a usar membrillo o mermelada sin azúcar añadido (para el relleno).
Preparación
Lo primero que tenés que hacer es mezclar en un tazón las almendras molidas, el azúcar, el huevo, la esencia de vainilla y la pizca de sal. Mezclá bien hasta que tengas una masa homogénea. Si la masa está muy pegajosa, podés refrigerarla un ratito para que sea más fácil trabajar con ella.
Prepará el horno, calentándolo a 180°C, y cubrí una bandeja para hornear con papel pergamino.
Con tus manos, formá pequeñas bolitas con la masa y ponelas en la bandeja, dejando un poquito de espacio entre cada una.
Hacé un huequito en el centro de cada bolita con tu dedo o con el mango de una cuchara.
Si querés, podés poner un poquito de membrillo o mermelada sin azúcar en cada huequito.
Llevá las pepas al horno precalentado y hornéalas durante unos 10-12 minutos, hasta que veas que los bordes están doraditos.
Una vez que las pepas estén listas, sacalas del horno y dejalas enfriar en la bandeja por unos minutos antes de transferirlas a una rejilla para que se enfríen completamente.