Cuando se trata de merendar, muchas veces las opciones parecen complicadas y se descartan. Sin embargo, hay recetas como la del pan árabe que son una excelente elección: a pesar de su apariencia sofisticada, es muy fácil de preparar y perfecta para acompañar con mates.
Aunque a menudo pedimos estos panes cuando salimos a merendar, pocos saben que se pueden preparar en casa en poco. Ya sea al horno o en sartén, requiere de muy pocos ingredientes, ganas y no mucha planificación.
El pan árabe se destaca por su textura suave y esponjosa por dentro y una corteza crujiente. Ideal para tostar o calentar en sartén, es versátil y perfecto para rellenar a gusto, desde simples “sanguchitos” hasta preparaciones más elaboradas.
Si bien muchos disfrutan del popular sándwich de jamón y queso, la realidad es que el pan árabe se presta para preparar todo tipo de “sanguchitos”, como por ejemplo, combinado con vegetales y salsas. Lo mejor es que se puede hacer sin la necesidad de prender el horno.
Cómo preparar pan árabe casero en horno y sartén
Ingredientes
500 g de harina de trigo 000, 0000 o integral
1 cdta de sal
1 cdta de azúcar
5 g de levadura seca o 20 g de levadura fresca
1 cda de leche en polvo
2 a 3 cucharadas generosas de aceite de oliva
170 a 200 ml de agua tibia
100 g de harina extra para estirar.
Paso a paso para preparar el pan árabe
1 - Preparar la Masa:
Mezclar la harina, sal, azúcar, levadura y leche en polvo.
Agregar el aceite y el agua tibia.
Amasar hasta obtener una masa lisa y homogénea.
2 - Primer Reposo:
Dejar reposar la masa durante al menos una hora, o hasta que duplique su tamaño.
3 - Formar y Reposar:
Desgasificar la masa y dividirla en aproximadamente 16 bolitas.
Dejar reposar las porciones durante 15 minutos más.
4 - Estirar y Cocinar:
Estirar cada bolita hasta obtener un grosor de aproximadamente 1 cm.
- Opción 1: Hornear en una bandeja con 100 g de harina extra en la base a 230°C (446°F) durante 7 a 10 minutos.
- Opción 2: Cocina en una sartén precalentada a fuego mínimo durante 5 minutos de cada lado.
¡Listo! Vas a tener el pan árabe perfecto para preparar deliciosos “sanguches” con lechuga, tomate, jamón y queso, o simplemente jamón y queso, por ejemplo. Además, si te sobra masa, podés congelarla, ya que se conserva en el freezer hasta 3 meses.