Muchas veces preparar el almuerzo o la cena puede ser todo un desafío porque las ideas se nos agotan o simplemente no contamos con el tiempo suficiente para preparar algo elaborado. Para esos casos, esta receta de croquetas crujientes de jamón y queso es ideal porque se hace en poco tiempo y te sacará de apuros en cualquier momento.
Siguiendo los pasos de esta receta, vas a lograr un plato salado riquísimo y rendidor, ya que con unos pocos ingredientes te saldrán una gran cantidad de unidades de croquetas que, además, podés freezar para comer en cualquier ocasión.
Receta de croquetas de jamón y queso, súper crujientes y deliciosas
Ingredientes
500 gr papas negras o blancas
200 gr jamón o Paleta
150 gr queso semiduro (puede ser muzzarella, gouda, mar del plata, etc)
50 gr manteca
2 huevos
Sal y pimienta
C/n pan Rallado
Abundante cantidad de aceite para freír
El paso a paso
1) Como primer paso deberás pelar y lavar las papas. En una olla con agua y un poco de sal, llevar a hervir las papas hasta que estén cocidas. Colar y dejar enfriar.
2) Hacer un puré, agregar la manteca derretida e incorporar 1 huevo. En este punto podés condimentar el puré como más te guste con más sal, pimienta o incluso nuez moscada.
3) Cuando el puré esté un poco más frío, agregar el jamón picado en cuadrados chiquitos y por último el queso también picado en trozos pequeños. Mezclar hasta integrar todo.(Si notas que queda un poco líquida la masa, podés agregar un poco de pan rallado).
4) Para formar las croquetas, tomar porciones de masa con una cuchara y con la mano formar bolitas o bastones del tamaño que más te guste.
5) finalmente rebozar. Tal como se hace con las milanesas, debés pasar las croquetas primero por huevo batido (usando la otra unidad que quedó) y después por pan rallado.
6) Cuando tengas las croquetas listas, llevalas al frío por unos 20 minutos (de esta manera nos aseguramos que las croquetas no pierdan su forma y se mantengan durante la cocción).
7) Transcurrido el tiempo de reposo, calentar el aceite en una sarten u olla grande y, una vez caliente, freír las croquetas. Es importante que las vayas dando vuelta para que se doren por todos lados. Sacar con una espumadera y dejar escurrir sobre un papel absorbente para quitar el exceso de aceite. ¡A disfrutar!
- Tip extra: podés acompañar las croquetas con alguna ensalada de verduras de estación.
Incluso podés sumar salsas o dips para realzar el sabor de las croquetas (algunas pueden ser ketchup casero, salsa ranchera, mayonesas aromatizadas o salsa barbacoa).
