Las facturas más populares para la hora del desayuno o la merienda y principalmente durante el fin de semana, son las medialunas dulces o de manteca. En las panaderías se venden en cantidades superiores a los churros, las bombas de fraile y los cañoncitos con dulce de leche, pero no hay nada como probarlas recién horneadas.
La receta clásica de las medialunas es tan fácil que vale la pena tomarse unos minutos para amasar y luego poder disfrutar de una merienda completa junto a un mate, un café con leche o la chocolatada.
A la hora de cocinarlas, hay un truco básico pero infalible para lograr que las medialunas alcancen el volumen deseado: el amasado y el tiempo de descanso deben respetarse sin apurar la preparación.
Receta de medialunas dulces
Ingredientes
1/2 vaso de agua tibia
una cucharadita de azúcar
una cucharadita de harina
175 gramos de manteca
500 gramos de harina
10 gramos de levadura
una cucharadita de sal
una cucharadita de vainilla
100 gramos de azúcar
dos huevos
175 gramos de leche tibia
¿Cómo cocinar medialunas dulces?
El primer paso consiste en activar la levadura. Se mezcla el agua tibia con una cucharadita de azúcar y una de harina, dejando reposar la mezcla durante 10 minutos. En un recipiente aparte, se bate la manteca y se incorpora gradualmente el azúcar. Luego, se añade la leche y un huevo, mezclando bien los ingredientes.
Se incorporan 150 gramos de harina a la mezcla, se añade la levadura activada y luego se agrega el resto de la harina de forma gradual. La masa se mezcla hasta obtener una consistencia homogénea y se deja reposar cubierta durante 30 minutos.
Una vez que la masa ha reposado, se estira hasta alcanzar un grosor de medio centímetro. Se corta en forma de triángulos, se enrollan para darles la forma característica de medialuna y se pintan con un huevo batido.
Las medialunas se hornean a temperatura moderada durante 30 minutos. Una vez cocidas, se retiran del horno, se dejan enfriar y se pintan con almíbar para darles su brillo característico.