La merienda es el momento perfecto para relajarse y disfrutar algo casero. Y quienes optan por recetas de temporada aprovechan la gran oferta de frutas para adquirir ingredientes más económicos. En este sentido, una opción para los fanáticos de las degustaciones frescas es la pastafrola de frutilla, que combina la suavidad de la masa con el toque refrescante y dulce del fruto estrella de esta época, por lo que si te gusta este postre tradicional no te lo podés perder.
Con la llegada de la primavera, estas frutas se convierten en las protagonistas de los postres, siendo la tarta de frutillas la opción más recurrente en muchas mesas. Sin embargo, es importante recordar que existen otras delicias, como la famosa torta enrejada o “pastafrola”, que se puede personalizar con diversos rellenos según la temporada, brindando una alternativa versátil y sabrosa para disfrutar en cualquier ocasión.
Receta de “pastafrola de frutillas” sencilla, económica y sabrosa
Si sos de los que les gusta innovar en la cocina y probar recetas nuevas con productos y alimentos que se encuentran en estación, no te podés perder esta increíble alternativa a la clásica tarta de membrillo o batata. Además, es importante destacar que en algunos lugares, se puede conseguir el kilo a $2500 pesos, por lo que es perfecto para cuidar el bolsillo sin dejar de sorprender a tus seres queridos.
Ingredientes
Para la masa:
250 gramos de harina de trigo
100 gramos de manteca
100 gramos de azúcar
1 huevo
1 cucharadita de polvo de hornear
1 cucharadita de esencia de vainilla
Una pizca de sal
Para el relleno:
400 gramos de frutillas frescas
100 gramos de azúcar
Jugo de medio limón
1 cucharada de maicena
1 cucharadita de esencia de vainilla
Preparación
- En un bol grande, mezclá la harina, el polvo de hornear y la sal. Agregá la manteca fría cortada en cubitos y trabajá la mezcla con los dedos hasta obtener una textura arenosa. Luego, incorporá el azúcar, el huevo y la esencia de vainilla. Amasá suavemente hasta formar una masa homogénea, envolvela en film y dejá reposar en la heladera durante al menos 30 minutos.
-Mientras tanto, prepará el relleno: Lavá y cortá las frutillas en mitades o cuartos, dependiendo de su tamaño. En una cacerola, colocá las frutillas, el azúcar, el jugo de limón y la esencia de vainilla. Cociná a fuego medio durante unos 10 minutos, removiendo de vez en cuando. Así, si querés que el relleno quede más espeso, disolvé la maicena en un poco de agua fría y agregála a la preparación, cocinando por unos minutos más hasta que quede con la consistencia deseada. Retirá del fuego y dejá enfriar.
-Una vez que la masa haya reposado, estirála sobre una superficie enharinada hasta que tenga un grosor de aproximadamente 5 mm. Envolvé un molde para tarta previamente enmantecado con la masa, recortando los bordes que sobresalgan.
-Verté el relleno de frutillas en la base de masa y distribuílo de manera uniforme. Con el resto de la masa, hacé tiras y formá un enrejado sobre la tarta. Si te sobra masa, podés hacer un borde decorativo. Llevá al horno y cociná durante 30-35 minutos o hasta que la masa esté dorada. Cuando esté lista, sacala y dejá enfríar antes de desmoldar.