Pocas cosas producen tanto placer en estos días frescos de otoño como una receta casera. Por eso, estos scones de manzana y canela son deliciosos para disfrutar en cualquier momento. Además de ser muy fáciles de preparar, son súper reconfortantes para degustar junto a un buen mate, pero también con un té o un café calentito en esas ocasiones en que te antojás de algo dulce.
Esta receta es muy sabrosa y, sin dudas, supera cualquier panificado comprado. Si no sabés qué merendar y querés comer algo más tentador que las tostadas o las galletitas, estos scones de manzana y canela son una gran opción. La textura suave de la masa, con la dulzura de la manzana y la pizca de canela, dan como resultado un bocadillo irresistible.
Ya sea para los fanáticos de las meriendas dulces, como para quienes prefieren lo salado, estos scones son adictivos. Lo mejor es que, mientras se hornean, el perfume de la canela y la manzana va llenando el ambiente, creando una atmósfera acogedora. Servilos tibios, recién salidos del horno, y vas a ver que vas a querer hacerlos mil veces.
Ingredientes para hacer unos scones de manzana y canela: fáciles y deliciosos
2 tazas de harina.
1 cucharada de polvo para hornear.
Media taza de azúcar.
Media cucharada de canela.
100 gramos de manteca fría cortada en cuadrados.
1 manzana grande picada en cubos pequeños.
1 taza de leche.
1 cucharada mezclada de azúcar y canela.
Receta fácil y reconfortante para los días de otoño: scones de manzana y canela
- Precalentar el horno a 220 grados.
- Preparar una bandeja para horno, cubriéndola con papel manteca para evitar que los scones se peguen.
- Tamizar la harina junto con la canela en un bol grande. Incorporar la manteca fría cortada en cubos y el azúcar.
- Trabajar la mezcla con los dedos hasta obtener una textura similar a migas de pan.
- Agregar la manzana rallada o picada finamente a la mezcla. Reservar un par de cucharadas de manzana para usar luego como decoración.
- Formar un hueco en el centro de la preparación e incorporar la leche. Integrar con cuchillos o una espátula, evitando calentar la masa con las manos.
- Enharinar la mesada y volcar la masa sobre ella. Amasar suavemente hasta formar un círculo grueso de unos 3 centímetros de altura.
- Colocar la masa en la bandeja preparada y cortar en 12 triángulos u otras formas, sin separarlos demasiado.
- Decorar la superficie con los trocitos de manzana reservados. Pincelar con manteca derretida y espolvorear con un toque extra de canela.
- Hornear durante 15 minutos, o hasta que los scones estén dorados por fuera y bien inflados.
- Dejar entibiar sobre una rejilla antes de servir. Van muy bien con un poco de manteca o mermelada, ideales para acompañar con un buen mate.