En tiempos de verano y olas de calor, la cocina se vuelve un desafío, ya que nadie quiere pasar horas entre hornallas encendidas ni gastar de más en ingredientes caros.
Por eso, las recetas simples, rápidas y económicas son la mejor alternativa y, en este sentido, una opción que cumple con todo es la tarta de berenjena y queso, una combinación sabrosa, fácil de preparar y perfecta para resolver cualquier comida por “dos mangos”.
Esta tarta se destaca por su practicidad y su equilibrio de sabores. Las berenjenas, bien cocidas y sazonadas, aportan una textura tierna y un toque ahumado que combina a la perfección con el queso derretido. Además, su preparación no requiere demasiados pasos ni ingredientes sofisticados, por lo que es una opción ideal para quienes buscan algo rico, rápido y accesible.
Receta de tarta de berenjena y queso
Ingredientes:
3 berenjenas cortadas en cubos pequeños
½ morrón rojo picado en cubos
1 cebolla grande en cubos
2 dientes de ajo finamente picados
2 cebollas grandes cortadas en pluma
Sal, pimienta y orégano a gusto
2 tapas de pascualina
100 gramos de queso rallado
150 gramos de mozzarella
3 huevos
2 cucharadas de harina
100 gramos de crema de leche
Paso a paso:
- Lavar bien las berenjenas y cortarlas en cubos pequeños. Espolvorearlas con sal y dejarlas reposar en un colador durante 20 minutos para eliminar el amargor. Enjuagar con agua y escurrir bien.
- En una sartén grande con un poco de aceite, saltear la cebolla en cubitos, el ajo picado y el morrón rojo a fuego medio hasta que estén tiernos. Agregar la cebolla cortada en pluma y cocinar unos minutos más.
- Incorporar las berenjenas escurridas y cocinar a fuego medio-bajo hasta que se ablanden y doren ligeramente. Condimentar con sal, pimienta y orégano a gusto. Dejar enfriar unos minutos. En un bol, batir los huevos junto con la crema de leche y la harina hasta obtener una mezcla homogénea. Agregar el queso rallado y la muzzarella en trozos, e integrar con el relleno de berenjenas ya tibio.
- Aceitar una tartera y colocar una de las tapas de pascualina. Verter el relleno de manera uniforme y cubrir con la otra tapa, cerrando bien los bordes con un tenedor o haciendo un repulgue. Llevar a horno precalentado a 180 °C y cocinar durante 35-40 minutos, hasta que la masa esté dorada y firme. Retirar del horno, dejar reposar unos minutos antes de cortar y servir tibia o fría.