Un nene del la ciudad de Oldenburg, en el noroeste de Alemania, que llevaba ocho días desaparecido, fue encontrado en una alcantarilla.
El milagro ocurrió casi de casualidad: tras una intensa búsqueda por tierra y aire, fue finalmente un vecino quien escuchó su llanto y alertó a la policía.
Joe, de 8 años, es un chico con dificultades en el aprendizaje. El nene se había esfumado el 17 de junio, mientras se encontraba jugando en el jardín delantero de su casa, y las autoridades trabajaban sobre las hipótesis más pesimistas, como un secuestro o un asesinato.
CÓMO ENCONTRARON A JOE TRAS OCHO DÍAS DE BÚSQUEDA
Durante todos estos días, el niño estuvo caminando dentro del sistema de cloacas, hasta que un transeúnte oyó un “lloriqueo débil” proveniente de una tapa de alcantarilla en la calle y llamó a la policía. El nene se encontraba a tan solo 300 metros de su casa, pero bajo tierra.
Los cuerpos de seguridad, bomberos y especialistas en rescate abrieron la tapa y hallaron al niño completamente desnudo e ileso. De inmediato, fue trasladado a un hospital cercano, donde fue tratado por hipotermia y deshidratación.
“Fue pura suerte”, declaró Steffan Klatte, vocero policial de Oldenburg, sobre el rescate del nene.