Las fuerzas armadas de Estados Unidos derribaron el sábado un globo espía chino en el mar frente a la costa de Carolina del Sur después que se desplazara sobre instalaciones militares delicadas en América del Norte.
Con un solo misil disparado desde un avión militar F-22 Raptor, la nave fue derribada a las 2:39 p.m. (hora local), poco después de que la Administración Federal de Aviación ordenara el cierre temporal de vuelos en los aeropuertos de Wilmington, Carolina del Norte, Myrtle Beach, Carolina del Sur y Charleston.
El presidente Joe Biden felicitó a los pilotos del F-22 por abatir en el espacio aéreo y sobre las aguas territoriales de Estados Unidos el aeroestato, que llevaba varios días sobrevolando el país.
“La acción deliberada y legal de hoy demuestra que el presidente Biden y su equipo de seguridad nacional siempre darán prioridad a la seguridad del pueblo estadounidense y responderán eficazmente a la inaceptable violación de nuestra soberanía por parte de la República Popular China”, declaró a su vez el Secretario de Defensa, Lloyd Austin.
En videos transmitidos en cadenas de televisión el sábado, el globo parecía caer verticalmente tras un impacto. Al momento de ser derribado, estaba a unos 18 km de altitud, a unos 11 km de la costa, según funcionarios del Pentágono.
“Luego de un análisis minucioso, los comandantes militares estadounidenses determinaron que derribar el globo cuando estaba encima del suelo planteaba un riesgo injustificado para las personas (...) debido al tamaño y la altitud del globo y su carga de vigilancia”, declaró el ministro de la Defensa.
El operativo militar, aunque de apariencia sencilla, podía acarrear algunas dificultades. El ejército de Estados Unidos tiene a disposición una gran variedad de aviones, los cuales podían realizar la misión. Sin embargo, el Pentágono decidió que utilizar el F-22, la cual es la única aeronave de combate capaz de realizar vuelos plenamente operativos a 20 mil metros de altura.
A diferencia del F-22, otros aviones de combate como los populares F-16 y F-15 solo pueden alcanzar alturas de 18 mil metros. Lo cual, en el caso del globo espía chino, hubiese dificultado la misión.
Además, el misil utilizado para derribar el globo espía fue Sidewinder AML9 X, el cual está diseñado para atacar blancos de corto y mediano alcance y tiene un costo de 400.000 dólares.
Según el Pentágono, el F-22 disparó el misil desde una altura de 17.600 metros. El globo espía al momento de ser derribado estaba entre 18.000 y 20.000 metros.
De acuerdo con expertos, la mayoría de aviones de combate operan a altitudes más bajas y si alcanzan la altitud a la que está el globo es probable que se dificulte las capacidades operativas y de ataque de la aeronave.
Durante la operación, F-15 Eagles, que despegaron desde la Base de la Guardia Nacional Aérea de Barnes, Massachusetts, escoltaron al F-22. Además, las fuerzas canadienses participaron de la operación y ayudaron a rastrear el sobrevuelo del globo.
También la Armada de EEUU desplegó el destructor USS Oscar Austin, el USS Philippine Sea y el USS Carter Hall, un barco de desembarco anfibio en apoyo de la operación.
Sobre el potente y moderno F-22 Raptor
El F-22 es un avión de combate táctico de quinta generación. De superioridad aérea y diseñado como un caza, la aeronave tiene gran versatilidad: además de su eficacia en el aire, puede realizar ataques terrestres y tiene capacidades avanzadas en lo denominado como guerra electrónica.
Además, el avión tiene viene equipado con la opción de supercrucero -capacidad de un avión para mantener el vuelo supersónico, a plena carga, de forma eficiente y sin usar postquemadores-; tiene una gran maniobrabilidad al tener una vectorización de empuje como muy pocas aeronaves la tienen. No obstante, su mayor fortaleza es su capacidad de sigilo y lo sensores avanzados con los que cuenta. Todo esto lo hace el mejor y más poderoso caza del mundo.
Por su diseño, F-22 es casi invisibles para los radares y sistemas de detección enemigos. Y sus sensores -los más avanzados en el mundo- le da la capacidad de detectar blancos mucho antes de que estos aparezcan en el campo visual del piloto.
Todas estas capacidades hacen que el valor del Raptor sea considerablemente alto. Tanto así que este tema ha estado en el centro del debate en Estados Unidos: con un costo estimado entre los 130 millones de dólares y los 300 millones, es el avión de combate más caro de la historia.
No solo tiene un alto precio de compra sino que además es uno de los aviones más caros de operar. Se estima que el costo promedio por hora es de 68.000 dólares, más del triple de lo que cuesta operar, por ejemplo, un avión de combate ruso.