Como ocurrió en la llamada "crisis de los balseros" de los '90, Estados Unidos comenzó a enviar migrantes deportados a la base naval de Guantánamo, en Cuba. La Casa Blanca confirmó que los primeros vuelos con personas en situación irregular ya aterrizaron en la base militar.
"Ya no permitiremos que Estados Unidos sea un vertedero de criminales ilegales de naciones de todo el mundo", declaró la portavoz Karoline Leavitt a Fox News.
El expresidente Donald Trump, quien busca un nuevo mandato, ordenó la preparación de la base para recibir hasta 30.000 migrantes. Además, dispuso el despliegue de 150 militares para reforzar la operación.
La reacción de Cuba y el historial de Guantánamo
El gobierno cubano repudió la medida. El presidente Miguel Díaz-Canel la calificó como un "acto de brutalidad".
La base de Guantánamo es conocida por haber albergado a prisioneros acusados de terrorismo, incluyendo miembros de Al Qaeda. Actualmente, según The New York Times, quedan una veintena de detenidos, seis de ellos sin cargos formales. No obstante, las autoridades aseguran que los migrantes deportados y los presos permanecerán en sectores separados.
Endurecimiento de la política migratoria
Trump intensificó su estrategia contra la inmigración ilegal con redadas en distintas ciudades y la eliminación de vías legales establecidas por Joe Biden. Además, ordenó la deportación de migrantes en aviones militares, algunos con grilletes, lo que desató tensiones diplomáticas con Colombia y protestas en Brasil.
La prisón de Guantánamo fue inaugurada en 2002 por el gobierno de George W. Bush en el marco de la "guerra contra el terrorismo". Tanto Barack Obama como Joe Biden prometieron cerrarla, pero no lograron hacerlo.
No es la primera vez que Estados Unidos traslada migrantes a Guantánamo. En 1994, el gobierno de Bill Clinton envió a unos 40.000 balseros cubanos que intentaban llegar a Florida tras la apertura de fronteras dispuesta por Fidel Castro. También se alojó en la base a migrantes haitianos en distintas oportunidades.
El origen de la base naval en Cuba
Ubicada en el extremo oriental de Cuba, la base naval de Guantánamo fue cedida a perpetuidad a EE.UU. mediante un tratado de 1903, tras la guerra hispano-estadounidense. Washington paga anualmente 4.085 dólares a La Habana por su uso, aunque el gobierno cubano se niega a aceptar los pagos desde 1959.
El tratado incluyó la controvertida Enmienda Platt, que permitió a EE.UU. intervenir militarmente en Cuba si sus intereses se veían amenazados. Desde entonces, Guantánamo ha sido un enclave estratégico y un foco constante de tensión diplomática entre ambos países.