El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, dijo este domingo que cree que Ucrania puede ganar su guerra contra Rusia, señalando cuán lejos del plan original de Moscú se había desviado su invasión.
“Ucrania puede ganar esta guerra”, dijo Stoltenberg después de asistir a una reunión de ministros de Relaciones Exteriores de la OTAN en Berlín el domingo.
La guerra en Ucrania no iba según lo planeado por Moscú, dijo Stoltenberg, y señaló que la ofensiva en la región de Donbás se había estancado y las tropas rusas se estaban retirando del área alrededor de Kharkiv.
“Rusia no está logrando sus objetivos estratégicos”, dijo Stoltenberg, y agregó que “Ucrania se mantiene firme. La OTAN es más fuerte que nunca”.
La reunión de este fin de semana en Berlín tuvo un carácter informal -sin aprobación de decisiones formales, una novedad en la Alianza Atlántica- y se centró tanto en la respuesta que se dará a Suecia y Finlandia cuando formalicen sus peticiones de adhesión como en censurar la invasión rusa de Ucrania, motivo que explica la aproximación histórica de los países nórdicos a la alianza militar.
Tanto Stoltenberg, como el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, también manifestaron su confianza en alcanzar un “consenso acordado” con Turquía respecto a la ampliación hacia los países nórdicos ante la amenaza que supone la invasión rusa de Ucrania, a la luz de la cual se abordó en Berlín la candidatura futura de Suecia y Finlandia.
Respecto a los disensos internos, Stoltenberg recordó que “cuando los hay, nos sentamos a hablarlo y confío en que podremos alcanzar un consenso acordado”.
La resistencia de Ankara a aceptar la candidatura de los países nórdicos - que se espera las formalicen en los próximos días - quedó manifestada este viernes, cuando el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, dijo que su país no las ve de forma favorable por el supuesto respaldo a “terroristas” de esas naciones nórdicas.
El líder turco criticó el supuesto apoyo de Suecia y Finlandia a activistas kurdos y a otras personas a las que Turquía considera “terroristas”.
Erdogan insistió en que Ankara no quiere que se repita el “error” de la entrada de Grecia en la OTAN, que Turquía estima que sirvió a Atenas para utilizar a la Alianza en contra de los intereses turcos.