Argentina se consagró campeón del mundo en Qatar 2022 ante Francia después de 36 años. La “Scaloneta” dominó durante 80 minutos, pero en solo dos jugadas Kylian Mbappé empató el partido. Se jugaron 120 minutos, con un resultado final de 3-3. Todo se definió en la tanda de penales en donde la selección nacional se impuso y levantó la copa ante el último campeón.
Los dirigidos por Lionel Scaloni llegaron el martes por la madrugada al país y luego de algunas horas de sueño salieron a festejar con los 5 millones de hinchas que salieron a las calles de Buenos Aires. Durante la caravana se mostraron distintas imágenes de los jugadores y canticos que no cayeron bien en Francia.
Noël Le Graët, presidente de la Federación francesa de fútbol, le escribió a la AFA para intentar terminar con las cargadas de los jugadores argentinos, en especial las del Emiliano “Dibu” Martínez, quien paseó con un muñeco con la cara del jugador francés.
En una entrevista con Ouest-France, el presidente de la FFF contó que le escribió a su par argentino para quejarse al respecto: “Escribí a mi homólogo de la Federación Argentina, encuentro estos excesos anormales, en el marco de una competición deportiva, y me resulta difícil de entender. Esto va demasiado lejos. El comportamiento de Mbappé fue ejemplar”. Por su parte, el delantero francés quiere pasar página y ya ha vuelto a los entrenamientos con el PSG.
El Gobierno de Francia exige a la FIFA que entre a mediar tras los insultos de jugadores argentinos
Mediante el ministro de economía, Bruno Le Maire, el Gobierno francés criticó duramente a los futbolistas de la albiceleste y sus declaraciones tras el encuentro: “Son unos insultos indignos, y ¿qué hace la FIFA? El deporte es una cuestión de juego limpio y de mostrar respeto por los otros, mostrar respeto también por los perdedores”, respondió hoy en la emisora Sud Radio Le Maire. Agregó que se trató de un “mal ejemplo de la parte argentina”.
También habló de “ensañamiento” de parte del arquero Emiliano ‘Dibu’ Martínez con Kylian Mbappé en la celebración realizada en el vestuario tras ganar en la tanda de penales. Hizo referencia al cántico que dice “Un minuto de silencio, para Mbappé que está muerto”, dejando en claro que esas palabras no han sentado nada bien en Francia.
