Los servicios de inteligencia de Estados Unidos están convencidos de que el globo chino derribado el sábado forma parte de un extenso programa de vigilancia global dirigido por el ejército de Beijing.
El programa se ejecuta desde la pequeña provincia insular de Hainan, en el sur de China, dijeron a la CNN fuentes de inteligencia estadounidenses.
Más tarde, la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, a bordo del avión presidencial Air Force One confirmó: “Estos globos son parte de una flota de globos desarrollados para operaciones de vigilancia”, para luego agregar que “en años anteriores otros globos chinos fueron avistados en varios países de los cinco continentes”.
El gobierno de Xi Jinping afirma que se trata de globos meteorológicos. Incluso, el Ministerio de Defensa advirtió que China “se reserva el derecho de utilizar los medios necesarios para hacer frente a situaciones similares”, en medio de una fuerte tensión bilateral.
La mayoría de las misiones se realizaron en el espacio aéreo de Estados Unidos
Al menos seis de los vuelos de estos globos chinos estuvieron en espacio aéreo de Estados Unidos, aunque no necesariamente sobre su territorio, según la emisora norteamericana. Los globos incluso son de diferentes modelos y presentes múltiples “variaciones”.
El FBI trata de reconstruir el globo chino derribado frente a las costas de Carolina del Sur
En tanto, en un laboratorio del gobierno en Quantico, Virginia, un equipo de élite de ingenieros del FBI se encuentra estudiando los restos del globo derribado el sábado frente a las costas de Carolina del Sur.
El grupo busca descifrar qué datos de inteligencia pudo haber recopilado el globo chino, a que satélites estaba vinculado y sus eventuales vulnerabilidades.
El estudio busca determinar además si la aeronave podía transmitir datos en tiempo real al ejército chino o si el dispositivo contenía “recopilación almacenada” que China analizaría más tarde al recuperarlo.
EEUU intenta recuperar todas las partes del globo chino
Los equipos de inteligencia quieren examinar el hardware del globo para aprender más sobre sus capacidades. Por ello, siguen las tareas de recuperación de sus restos frente a la costa de Carolina del Sur.
“Cuando el globo está en nuestras manos, podremos observar la tecnología, podremos reconstruir la cadena de suministro, descubrir quién ayudó a construirlo y qué componentes fueron importantes”, dijo el congresista demócrata Jim Himes, miembro del Comité de Inteligencia de la Cámara.
Pero la principal pregunta que se hacen en Washington sigue siendo cuál era la intención de China. Funcionarios de defensa estadounidense rechazaron la versión de Beijing de que se trataba de un globo meteorológico y dijeron que la trayectoria del aparato era intencional.
Además, afirmaron que Estados Unidos aprendió más sobre las capacidades del globo al permitir que pasara sobre Estados Unidos que si lo derribaran de inmediato. “Después de todo, esto es un globo. No es un bombardero furtivo”, dijo una fuente de defensa.