El dramático episodio ocurrió en Nottinghamshire, Inglaterra. Según el Tribunal de la Corona de Nottingham, mencionado por el medio The Sun, la pareja estaba distanciada pero él habitualmente visitaba la vivienda para ver a sus hijos.
Michael McDaid estranguló a Rachel con el cordón de un zapato el pasado 19 de abril. Al salir de la propiedad, se cruzó su hijo, a quien le dijo: “No podés entrar a la casa porque la maté”.
Inmediatamente después de eso, el acusado llamó a la policía para confesar el femicidio y fue detenido.
Según contó el medio inglés, la familia de la víctima se expresó con un conmovedor mensaje: “Estamos desconsolados por la pérdida de nuestra amada madre, hija, hermana, tía y prima”.
“Rachel nos fue arrebatada de repente y no podemos aceptar el hecho de que nunca volveremos a ver su hermoso rostro y su sonrisa. Estamos realmente devastados”, finalizó.
Finalmente, McDaid se declaró culpable de asesinato y recibiría la sentencia de cadena perpetua.
