Irán disparó el martes una salva de misiles balísticos contra Israel en represalia por la campaña israelí contra los aliados de Teherán, Hezbollah, en Líbano.
Las alarmas sonaron en todo Israel y se oyeron explosiones en Jerusalén y en el valle del río Jordán, después de que los israelíes se amontonaran en los refugios antiaéreos.
La radio del ejército israelí dijo que se habían lanzado casi 200 misiles. La Guardia Revolucionaria iraní dijo que Irán había lanzado decenas de misiles contra Israel y que si Israel tomaba represalias la respuesta de Teherán sería “más aplastante y ruinosa”.
Más tarde, el ejército israelí dio la señal de alerta y dijo que los israelíes eran libres de abandonar sus refugios. El portavoz militar Daniel Hagari dijo que el ejército no tenía conocimiento de ningún herido como consecuencia de los ataques con misiles iraníes.
Describió el ataque como grave y dijo que tendría consecuencias.
Un alto cargo iraní dijo a la agencias de noticias Reuters que la orden de lanzar misiles contra Israel había sido dada por el líder supremo del país, el ayatolá Alí Khamenei, que permanece en un lugar seguro, añadió el alto funcionario.