Los periodistas apostados en una guarda permanente en la London Clinic se sorprendieron por el movimiento de vehículos oficiales. Poco más tarde, llegó un parte del palacio de Kensington: la princesa Kate Middlleton dejó la clínica luego de 13 días de internación para continuar su recuperación en su hogar.
Sin embargo, el nuevo comunicado es tan escueto que no aclara ninguno de los rumores que se multiplicaron sobre el estado de salud de la princesa durante todos estos días.
Kate Middleton regresó a casa
El comunicado oficial tiene unas pocas líneas y se limita a dar la siguiente información básica sobre Kate Middleton: "La princesa de Gales ha regresado a su hogar en Windsor para continuar con su recuperación tras la cirugía. Está teniendo un buen progreso. El príncipe y la princesa desean expresar un enorme agradecimiento al equipo completo de la London Clinic, especialmente al equipo de enfermería por el cuidado que le han dedicado".
"La familia de Gales continúa estando agradecida por los deseos de recuperación que ha recibido de todo el mundo", cierra el mensaje.
Sin embargo, nada se dice sobre el tema principal, que disparó todo tipo de versiones y especulaciones: ¿de qué fue operada Kate Middleton y cuál es su estado de salud?
En el primer parte solo se dijo que fue una operación abdominal programada. Pero como no hubo más detalles, las versiones y comentarios ocuparon ese vacío informativo. Y como suele suceder, no fueron buenas noticias las que llenaron las páginas de los diarios o los portales online.
Desde una histerectomía hasta un "coma inducido"
Periodistas británicos y europeos que siguen a las familias reales compitieron por ver quién daba una información de impacto, pero que pudiera ser avalada por algún dato. Sin embargo, esos rumores jamás pudieron ser corroborados. Solo la especulación del tiempo de internación -14 días- y la convalecencia de casi dos meses -hasta más allá de la Pascua- dio lugar a este tipo de versiones.
Se dijo que el tiempo tan prolongado para permanecer en la London Clinic obedecía a una operación para retirar todo el aparato reproductor de la princesa de Gales: una histerectomía.
Esta versión tuvo amplia acogida en España. En ese país, al menos dos periodistas dijeron saber todos los detalles que una fuente de palacio les reveló, pero no podían precisar todavía más.
Luego, tomando como fuente versiones extraoficiales, señalaron que algo en el postoperatorio se había complicado. En tanto, este fin de semana llegó otra noticia alarmante: la supuesta complicación hizo que el equipo médico decidiera producir un "coma inducido" a Kate Middleton para esa etapa posterior a la cirugía.
De nuevo, nada de eso se dijo, se comentó o se afirmó o rechazó de manera oficial. Por lo que las versiones siguieron dando la vuelta al mundo.
Como todos son datos nunca confirmados, los fotógrafos adquieren un valor agregado por sus imágenes. Como la de Natasha Archer, secretaria de Kate Middleton, quien, coincidiendo con el anuncio del regreso a Kensington, se mostró manejando su propio vehículo fuera de la clínica.
Mientras tanto, el rey Carlos III sigue un día más en recuperación en la misma clínica. Fue operado por un agrandamiento de la próstata, un probrlema de salud común para los hombres mayores.