El periodista y activista cubano Lázaro Yuri Valle Roca –detenido desde junio de 2021– fue condenado a 5 años de prisión por los delitos de “propaganda enemiga de carácter continuado” por pedir elecciones libres.
En la misma causa, Alien Tijerino Castro, recibió cuatro años por propaganda enemiga de carácter continuado, Ruslán Hernández Reyes, dos años, y Yusniel Milián González, un año, ambos por propaganda enemiga.
El contenido de la sentencia fue difundido la víspera en redes sociales por la activista Eralidis Frometa, esposa del comunicador.
La sentencia acusa a Valle Roca y Tijerina de tener una “ilícita y autodenominada ONG” llamada Delibera en la que hacía reuniones “con el objetivo de planificar acciones contrarias al sistema social y político en Cuba”, además de filmarlas y difundirlas por redes sociales para “divulgar al mundo una imagen de inestabilidad social y política dentro del país”.
El tribunal castrista apunta que Tijerino Castro escribió octavillas con un “enfoque contrario al sistema social y político vigente en Cuba” y en que aparecían leyendas como “Patria y Vida”, canción crítica con el Gobierno cubano y lema de las protestas de 2021, y “el pueblo exige democracia”.
Además, el fallo sostiene que los sentenciados organizaron una manifestación el 4 de junio de 2021 que fue filmada y colgada en la cuenta de Facebook de la ONG Delibera por Valle Roca.
Días después, agrega la sentencia, los condenados tiraron en diferentes puntos las octavillas impresas mientras el periodista lo grababa para después subirlo a las redes de la ONG.
“Según el Tribunal, estas frases que hablan de la libertad y de derechos humanos básicos que no prescriben en el tiempo, como la libertad de expresión, son malinterpretadas en un contexto diferente. Fueron acusados de propaganda enemiga por lanzar frases de Martí y Maceo, que sin dudas, si estuvieran vivos serían enemigos para una dictadura en muchos aspectos similar y hasta peor, al poder colonial español al cual se opusieron”, aseguró el periodista José Raúl Gallego, condenando la sentencia.
Valle Roca está en prisión provisional desde el 15 de junio de 2021, cuando la Policía lo arrestó después de haberlo citado a una unidad policial, supuestamente para cerrar una investigación de 2020 por el delito de resistencia. El día antes de su detención, Valle había informado sobre el lanzamiento de octavillas con mensajes a favor de la democracia desde un edificio habanero, en su canal de YouTube “Delibera”.
En el tiempo que lleva encarcelado, el periodista ha sufrido los 15 tipos de tortura descritos por la organización Prisoners Defenders (PD), que presentó un documento ante la ONU denunciando patrones de malos tratos en las prisiones cubanas.
El listado está formado por: privación de la atención médica, trabajos forzados fuera de su condena penal, obligación a mantener posturas incómodas o dañinas, confinamientos de castigo en solitario, uso de la temperatura como mecanismo de tortura, agresiones físicas, traslado a localizaciones desconocidas, desorientación intencionada, privación de agua o alimentos, del sueño y de la comunicación con abogados y allegados, amenazas a su integridad y a la de sus seres queridos, despliegue de armas o elementos de tortura, sometimiento intencionado a la angustia y a la incertidumbre por la situación de algún familiar y humillación, degradación y maltrato verbal.
El caso de Valle Roca –de 60 años– fue mencionado con especial atención en el informe semestral sobre Cuba de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), presentado en abril. Además, en un comunicado, el Instituto Cubano por la Libertad de Expresión y Prensa (ICLEP) condenó la sanción contra el periodista y exigió al Gobierno su liberación inmediata. De igual forma, la ONG Observatorio Cubano de Derechos Humanos, con sede en Madrid, también condenó la sentencia.