La inflación en Brasil alcanzó su nivel más bajo desde fines de 2020, un dato que respalda los llamados del gobierno al Banco Central para que baje las tasas de interés.
El índice de precios al consumidor IPCA-15 cayó a un mínimo de 30 meses de 4,16%, desde 5,36% en el mes anterior, informó la agencia gubernamental de estadísticas IBGE. La cifra está por debajo del 4,20% anticipado por economistas a la agencia Reuters.
Los datos más recientes se dieron a conocer un día después de que el presidente del Banco Central, Roberto Campos Neto, descartara un recorte inminente de la tasa de interés y dijera en una audiencia en el Senado que el costo del crédito actual era apropiado para abordar las preocupaciones sobre la inflación.
El presidente Luiz Inácio Lula da Silva viene reclamando que se reduzcan los costos de los préstamos desde su máximo actual de seis años de 13,75%, pero Campos Neto rechazó sus críticas diciendo que las autoridades deben asegurarse de que las expectativas de inflación estén dentro de los objetivos oficiales.
Expertos
"¿Esperarán RCN (Roberto Campos Neto) y su equipo a que la inflación actual llegue al 3% antes de empezar a recortar las tasas de interés?", preguntó Luiz Alves, administrador de fondos de Versa, en una publicación de Twitter.
Brasil tiene una meta de inflación de 3,25% para este año, pero una encuesta del Banco Central mostró que los economistas privados esperan que el índice oficial llegue a 6,04% a fines de año.
William Jackson, economista jefe de mercados emergentes de Capital Economics, dijo que duda de que las autoridades monetarias cambien a recortes de tasas de interés de manera inminente, considerando que la inflación subyacente sigue siendo fuerte y que el Banco Central ha estado adoptando un tono agresivo.
"Dicho esto, las probabilidades están cambiando ligeramente hacia un comienzo más temprano del ciclo de relajación que nuestro pronóstico actual (para el cuarto trimestre)", agregó en una nota a los clientes.
Costos
En el mes hasta mediados de abril, según el IBGE, los precios al consumidor subieron un 0,57%, por debajo del 0,69% del mes anterior. Se esperaba que el índice subiera un 0,61%, según la mediana de las previsiones de un sondeo de Reuters.
El aumento mensual fue impulsado por mayores costos de transporte luego de un aumento en los precios de la gasolina y el etanol, dijo la agencia, aunque eso fue parcialmente compensado por la desaceleración de los costos en el grupo clave de alimentos y bebidas.
"En general, el panorama de la inflación continúa mejorando en Brasil", dijo el economista jefe para América Latina de Pantheon Macroeconomics, Andrés Abadia. Eso respalda la opinión de que "los recortes en las tasas de interés están a la vuelta de la esquina", agregó.