Al menos una decena de personas murieron el miércoles a causa de inundaciones por las fuertes lluvias en dos provincias del sureste de Turquía, ya afectadas por el devastador sismo de principio de febrero, informó la prensa local.
Nueve personas perdieron la vida en la ciudad de Sanliurfa, entre ellas cinco sirios hallados en el sótano de un edificio, y otras dos fueron dadas por desaparecidas, según la agencia de noticias oficial Anadolu.
Otra persona falleció y tres más estaban siendo buscadas en la provincia vecina de Adiyaman, agregó.
La víctima se encontraba en el interior de un contenedor transformado en alojamiento de urgencia, cuando el agua la arrastró, precisó la agencia.
El gobernador de la provincia de Sanilurfa, Salih Ayhan, indicó que “hay ciudadanos esperando a ser rescatados”.
“La situación está bajo control. Hay apoyo de las provincias vecinas”, agregó el funcionario, aunque reconoció que tiene “preocupación por el posible aumento del número de muertos”.
Por su parte, el ministro del Interior turco, Suleyman Soylu, indicó a la población que no se acerque a los lechos fluviales en las zonas afectadas por las fuertes lluvias ante el riesgo de inundación.
“Nuestros gobernadores, comandantes de la Gendarmería y directores regionales están allí. Las carreteras están abiertas, hay electricidad y agua. Continúan las preocupaciones y advertencias”, añadió el ministro.
Ayhan afirmó que la provincia recibió las lluvias más fuertes “en los últimos años”.
Más de 48.000 personas murieron en Turquía y casi 6000 fallecieron en Siria tras los sismos del 6 de febrero que sacudió la zona, la peor catástrofe de la región en tiempos modernos.
Muchos de los supervivientes del terremoto están alojados de forma temporal en instalaciones de tiendas de campañas y contenedores, en las 11 provincias turcas afectadas por el temblor.