A 53 ascienden las víctimas mortales del ataque terrorista perpetrado por miembros del autoproclamado Estado Islámico (Daesh por su siglas en árabe) contra lugareños que recogían trufas en el desierto de Palmira, al sureste de la ciudad de al-Sukhna, en la provincia siria de Homs.
Testimonios de testigos aseguran que “los grupos terroristas los atacaron con ametralladoras durante mucho tiempo y también prendieron fuego a los vehículos de las víctimas en el lugar del ataque”.
El director de la Autoridad General del Hospital Nacional de Palmira, Dr. Walid Odeh, declaró que los cuerpos de 53 personas llegaron al Hospital junto a otros cinco heridos de bala. Entre los asesinados se encontraban 46 civiles y siete soldados, ahondó.
Según datos de recogidos tras los primeros exámenes médicos a los fallecidos, el doctor Odeh destacó que la causa de la muerte fueron disparos de armas de fuego en la cabeza.
Por otra parte, los sobrevivientes lesionados “recibieron los primeros auxilios necesarios en el Hospital de Palmira y luego fueron trasladados a otros hospitales en Homs”, agregó.
En los últimos años, decenas de personas indefensas, principalmente mujeres y niños, han sido víctimas de agresiones similares en varias partes del país, cuando los terroristas aprovechan que recogen trufas para atacarlos con armas de fuego.
El pasado 12 de febrero, combatientes del Daesh asesinaron a cuatro personas e hirieron a diez en el sur de la ciudad de Palmira, al este de la provincia de Homs.